hernani - El lehendakari, Iñigo Urkullu, otorgó ayer a las empresas de la máquina herramienta vasca, que supone el 80% del sector en el Estado, el papel de motor y liderazgo en el proceso de transición de la Fabricación Avanzada a la Industria Inteligente en la que, según aseguró, se encuentra inmerso el conjunto del tejido productivo vasco. Su capacidad de reponerse de una dura crisis económica, su apuesta por la internacionalización y sus esfuerzos por innovar fueron algunos de los aspectos que destacó el lehendakari para argumentar esta confianza institucional.

Iñigo Urkullu intervino ayer en la asamblea anual que AFM Clúster (Asociación Española de Fabricantes de Máquina Herramienta) celebró en la Fundación Orona Ideo de Hernani, donde consideró que el sector manufacturero vasco tiene ante sí un nuevo reto como es el de transitar de la Fabricación Avanzada hacia un nuevo modelo más progresista que se denomina Industria Inteligente. Y en esta transformación, indicó que “AFM es el mascarón de proa”, indicó.

El lehendakari subrayó varias de las características de este sector que, en su opinión, aplicadas al conjunto industrial de Euskadi serán capaces de situar al conjunto de empresas en posiciones competitivas a nivel mundial. Una de las principales es que la máquina herramienta ha logrado pasar de una dura crisis económica a “la competitividad internacional en tan solo diez años”. Como llaves que han permitido esta transformación citó la innovación, la apuesta por la calidad y la internacionalización, una asignatura en la que se ha tenido que examinar la economía vasca los últimos años.

“También lo son la concertación de la política industrial, la colaboración público-privada y la acción a través del Clúster”, añadió el lehendakari entre las claves de desarrollo de las compañías de este segmento industrial, para añadir que este cóctel de ventajas competitivas han llevado a este sector eminentemente vasco a registrar durante el pasado ejercicio cifras de facturación y de exportaciones “que han crecido por encima del Producto Interior Bruto” de la Comunidad Autónoma Vasca.

Según los datos que AFM Clúster presentó el pasado miércoles en una comparecencia para anunciar la celebración de la asamblea anual de ayer, el sector de la máquina herramienta incrementó sus ventas un 5,4% en 2018 hasta llegar a los 1.796 millones de euros, mientras que el ascenso de las exportaciones fue aún mayor, de un 10%.

resultados históricos Unos números que fueron calificados de “históricos” por el presidente y el director general de AFM Clúster, César Garbalena y Xabier Ortueta, respectivamente.

No obstante, advirtieron de que sus previsiones para el presente ejercicio contemplan un mantenimiento o una leve caída de la actividad debido, entre otras razones, a un clima económico mundial variable.

Precisamente la “incertidumbre” de los mercados fue uno de los aspectos que planteó ayer el lehendakari durante su discurso, quien no obvió las dificultades que esta evolución puede presentar pero afirmó que ante ellas “el sector de la máquina herramienta ha demostrado capacidad competitiva y muestra signos de fortaleza para seguir creciendo”.

Esta buena situación y el músculo que ha mostrado en temporadas más duras fueron valoradas por Iñigo Urkullu, quien avanzó ante los representantes de un gran número de las más de 450 empresas integradas en AFM Clúster que su responsabilidad para dirigir al sector manufacturero vasco hacia la Industria Inteligente se verá respaldada por el conjunto de las instituciones, quienes “reforzarán su contribución al sector de la máquina herramienta”.

Entre las acciones que persigue fomentar la política del Gobierno vasco en esta labor de apoyo se encuentran las encaminadas a situarse cerca de sus necesidades y “fortalecer el ecosistema económico de Euskadi” donde se desenvuelve el 80% de ellas. Como ya señaló anteriormente, añadió que el Ejecutivo vasco impulsará la estabilidad institucional, conocedor de que esta es una de las peticiones del empresariado.

El objetivo del equipo de gobierno es, según dijo, impulsar el “plan 4 I”, que definió como “Industria, Inversión, Innovación e Internacionalización”, acompañado de “rigor en la gestión, estabilidad institucional y cercanía a la empresa”.

Urkullu también destacó la buena marcha de la actividad industrial en Euskadi y el ritmo estable de creación de empleo. En un contexto de ralentización, ambas cuestiones siguen teniendo un protagonismo destacado en la economía.