BILBAO - La industria vasca de automoción agrupada en torno al cluster Acicae facturará este año cerca de 20.000 millones de euros, frente a 18.400 en 2017, multiplicando por siete las cifras de hace 25 años cuando se puso en marcha el citado cluster confirmando el importante peso que el sector del automóvil tiene en Euskadi.
La cifra fue adelantada ayer por los máximos responsables del cluster, el presidente de Acicae, José Esmorís, y la directora, Inés Anitua, con motivo de la presentación de una exposición de vehículos, -coches, motos y furgonetas-, fabricados en Euskadi en los últimos cien años, y presentada en las instalaciones del AIC de Amorebieta-Boroa (Bizkaia) con motivo de XXV aniversario de la citada asociación.
Acicae nació con una docena de empresas y ahora cuenta con 190 asociados y la cifra de negocio del sector se ha multiplicado por siete. Las 300 compañías que configuran el sector industrial ligado a la automoción en el País Vasco emplean a unas 41.000 personas en las plantas sitas en la CAV, facturan unos 20.000 millones de euros y configuran uno de los pilares de la economía vasca.
La exposición recoge 10 coches y nueve motos fabricados desde 1928 a la actualidad y es la primera vez que se reúnen en un mismo espacio. La muestra incluye “ejemplares únicos”, como el automóvil Donosti del Garaje Internacional de San Sebastián, de 1928; el Estancona, construido en 1953 en Durango por José Estancona Acha; o el Triver modelo rana, de 1955 de Construcciones Acorazadas.
De igual forma, reúne al utilitario Goggomobil, de licencia alemana Glass; la furgoneta DKW, fabricada en la planta de montaje de furgonetas de Imosa, en acuerdo con la alemana Auto-Union; así como la nueva Clase V de Mercedes Benz. También incluye motos de época como Velosolex Orbea, Lambretta o Lube.
Urkullu El lehendakari, Iñigo Urkullu, reconoció en el acto conmemorativo del XXV aniversario del cluster celebrado por la tarde, la importancia de la industria de automoción en la economía de Euskadi, y abogó por “mejorar el ecosistema económico y la competitividad” del sector del que señaló que es un elemento básico de la industria vasca”.
En referencia concreta a la labor de Acicae, Urkullu destacó que el cluster había sido una iniciativa “pionera” y hoy en día “un referente en Europa”.
El lehendakari asistió al acto acompañado, entre otros, por las consejeras de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia; de Educación, Cristina Uriarte, y de Trabajo, María Jesús San José; el diputado general de Bizkaia, José María Iruarrizaga; el diputado foral de Promoción Económica, Imanol Pradales, así como destacados representantes del sector, entre ellos, el presidente de CIE Automotive, Antón Pradera.
El lehendakari destacó en las instalaciones de AIC en Amorebieta que la automoción “es un sector fundamental en Euskadi” y resaltó especialmente el esfuerzo de las organizaciones del sector para reforzar la necesidad de compartir una estrategia industrial entre las instituciones públicas y la empresa. “Colaborar y tejer alianzas es la base firme para seguir ganando competitividad, generar actividad, riqueza y empleo de calidad”, afirmó Urkullu.
El lehendakari señaló que el sector vasco de automoción ha sabido adaptarse a las necesidades del mercado en todo momento. Y en el contexto actual ello supone prever la necesidad de alcanzar soluciones de movilidad eléctrica y eficiencia energética para responder a las nuevas tendencias de movilidad, con más eficiencia y con un menor impacto medioambiental.
El lehendakari resaltó que el sector de automoción es “la punta de lanza de la revolución industrial 4.0 en el País Vasco”.
El coche de Arriortua En la exposición se puede ver, entre otros vehículos, a uno muy significativo para la localidad vizcaina de Amorebieta, donde está la sede de AIC, y ese no es otro que el Carmen, el coche modular auspiciado por el que en su momento era vicepresidente de General Motors-Opel, Iñaki López de Arriortua, que pretendió de su mano instalar una fábrica de automóviles en la Comunidad Autónoma Vasca en los años 90 del siglo pasado.
López de Arriortua, Superlópez, ideó el Carmen, -un juego de palabras entre car coche en inglés, y men, hombres, y la fiesta del Carmen, de su pueblo natal, Amorebieta- como un prototipo culminación del proyecto Aurora que adelantaba hace 20 años muchas de las tendencias actuales del automóvil, como puertas sin manilla, -se abría con mando a distancia-, salpicadero digital, cámaras de vídeo en vez de espejos retrovisores etc.