BILBAO - El grupo vasco Teknia, un fabricante de componentes para el sector de automoción, presentó ayer oficialmente sus nuevas instalaciones de I+D en el AIC-Automotive Intelligence Center, sito en la localidad vizcaina de Boroa-Amorebieta.
La compañía ha creado una división, Teknia Technologies, que aglutina el know-how del grupo para liderar, gestionar y ejecutar los proyectos internos y externos. Esta división es el resultado de una nueva visión y estrategia global del área de ingeniería, concentrando el conocimiento del grupo y agrupando I+D e Ingeniería bajo un mismo paraguas, siendo, según la empresa, un factor diferenciador clave para que el grupo se distinga como una de las empresas de referencia en el sector.
Las instalaciones de AIC se suman así a las que ya tiene Teknia Tech en Azuqueca de Henares (Guadalajara) y Martos (Jaén).
Como muchas empresas vascas, Teknia surgió gracias a la iniciativa de un emprendedor, Javier Quesada con una pequeña empresa vizcaina, Elix, con 29 trabajadores, en 1992. Hoy en día, Teknia tiene una veintena de plantas repartidas por Europa, América, África y Asia. Y de las citadas 29 personas del inicio se ha pasado a unas 2.600.
Este grupo industrial familiar vasco cuenta con tres divisiones productivas: Plásticos, Decoletaje y Metal así como los centros de I+D que forman Teknia Technologies.
La compañía tiene en la CAV, dos plantas fabriles principales, una en Elorrio y otra en Ortuella, con unas 250 personas en plantilla.
Fabrica piezas para diferentes áreas y sistemas del coche desde inyectados plásticos para depósitos de líquido de frenos, de limpiaparabrisas a pistones para las piezas de freno. En metal, en concreto, elabora productos relacionados a los sistemas de llenado del combustible de los coches, tubos ligados a airbags, pretensores pirotécnicos etc.
Teknia sigue una vía de crecimiento en la facturación que ha pasado de 220 millones de euros en 2014 a 250 millones en 2015 y prevé alcanzar los 300 millones. - X. A.