bilbao - Kutxabank anunció ayer la venta de la mitad de sus activos inmobiliarios al fondo de inversión Lone Star, en una operación con “ventajas evidentes” que permitirá al banco vasco seguir mejorando sus índices de solvencia y centrarse en otras actividades financieras. El traspaso, que se formalizará en abril, se ha cerrado por un importe de 930 millones de euros y supone la mayor operación de venta de una promotora inmobiliaria desde 2007.

El acuerdo permite a Kutxabank dar “un paso de gigante” y acelerar su plan de negocio del área inmobiliaria. La gestión directa, explica la entidad, hubiese precisado de unos tres años para alcanzar unos volúmenes de comercialización similares. Así, el banco vasco que dirige desde hace menos de un mes Gregorio Villalabeitia tras la marcha de Mario Fernández podrá gestionar mejor los activos inmobiliarios que mantiene en su balance, reforzando otras actividades financieras como el crédito a los promotores.

Fuentes de la entidad explicaron que la operación, pese a sus beneficios, no era una necesidad, dados los buenos ratios de solvencia que presenta el banco. Kutxabank obtuvo el mejor resultado de entre las compañías financieras del Estado español en el test de estrés realizado por las autoridades europeas en el mes de octubre. En todo caso, se trata de un buen acuerdo que se enmarca en el proceso de limpieza de activos vinculados al ladrillo en el que está inmerso el sector financiero, y que repercutirá positivamente en sus números de solvencia.

La transferencia de estos activos se produce a través de tres vías, por un lado de las sociedades Neinor y Neinor Berria, y en tercer lugar a través de activos ligados directamente a Kutxabank. Tras la suscripción del acuerdo en abril, el banco llevará a cabo una reorganización de la estructura de su negocio inmobiliario, incluyendo la creación de un nuevo holding en el que se incluirán activos de Neinor, Neinor Berria, y los directamente ligados al banco que serán traspasados al fondo.

Además, se firmará un contrato de prestación de servicios para que la nueva Neinor siga gestionando los activos inmobiliarios que se mantienen en el balance de la entidad. Asimismo, el comprador asumirá la totalidad de la plantilla de la sociedad inmobiliaria. Para Neinor, que cuenta con importantes promociones urbanísticas en Euskadi, la compra por parte del fondo Lone Star supone “una mejora relevante” en el enfoque de su negocio.

Kutxabank destaca que Lone Star, que recientemente se ha hecho con paquetes inmobiliarios de bancos españoles y europeos, presenta una capacidad financiera relevante y tiene experiencia en el sector inmobiliario y la promoción residencial.