SANTIAGO DE COMPOSTELA. La fusión entre Caixa Galicia y Caixanova creará la cuarta caja de ahorros española por volumen de activos, al sumar 78.077 millones, sólo por detrás de La Caixa, Caja Madrid y Bancaja.
Los consejos de administración de Caixanova y de Caixa Galicia, reunidos hoy en Vigo y A Coruña, respectivamente, han aprobado el inicio de un protocolo de fusión entre ambas entidades.
La fusión implicará el cierre de 204 oficinas y 990 puestos de trabajo menos, con prejubilaciones, así como pedir al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) 1.162 millones de euros.
Según los datos facilitados por la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) correspondientes a 2009, y recabados por Efe, la unión de las dos cajas gallegas crea la cuarta caja por volumen de activos al sumar 78.077 millones de euros.
De ellos, 46.339 millones provienen de Caixa Galicia y 31.737 millones de Caixanova.
De esta forma, la caja resultante sólo sería superada por La Caixa (271.872 millones de euros), Caja Madrid (191.904 millones) y Bancaja (111.459 millones).
Una vez culmine el proceso de reestructuración financiero en marcha, la nueva caja gallega ocuparía el quinto puesto, por detrás nuevamente de las tres grandes cajas, más la entidad que resulte de la fusión de las cajas catalanas Caixa Catalunya, Manresa y Tarragona, que sumará 81.024 millones de euros en activos.
En cuanto al volumen de depósitos, la nueva caja gallega aglutinará 48.784 millones de euros, con lo que ocupará la quinta posición.
El Consejo de Administración de Caixanova aprobó el pasado 6 de abril por unanimidad el inicio formal de las negociaciones para explorar una posible fusión con Caixa Galicia.
La semana anterior, tras reunirse con el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, los presidentes de ambas cajas se comprometieron a iniciar oficialmente los contactos para analizar la posible fusión, tras lo que el Consejo de Caixa Galicia ratificó el acuerdo suscrito y nombró a un equipo para negociar la posible fusión.
Según la auditoría encargada por la Xunta para estudiar la viabilidad de la fusión a la empresa KPMG, la posible caja fusionada debería pedir alrededor de 1.198 millones de euros al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), que finalmente se quedan en 1.162, detallaron fuentes financieras.