PASAIA. Desde la primera palada quedó claro que Hondarribia y Urdaibai eran los más fuertes en la tanda de honor, en un duelo vasco- gallego del que pronto se descolgaron Tirán y Cabo que buscaban puntos para mejorar en la clasificación, sin opciones de triunfo de regata.

Hondarribia enseñaba proa en un campo de regateo espectacular porque contemplaba hasta cinco ciabogas y ofrecía opciones para el lucimiento técnico de las mejores embarcaciones.

Las diferencias entre el líder y Urdaibai eran mínimas y en cualquier giro podía decantarse la tanda en favor de cualquiera de ellos, por lo que cada una de esas ciabogas abría el abanico de opciones de victoria para una u otra.

Hondarribia mostró que su punto de forma no descansa sólo en la fuerza de sus remeros y que la dirección de su patrón es otra de las claves de su excelente temporada, lo que le permitió hacerse con una victoria que puede ser determinante para el devenir de la Liga San Miguel.

Kaiku se convirtió en primer protagonista de la bandera, en un campo de regateo que parecía un lago por la tranquilidad de sus aguas dentro de la bahía pasaitarra, y los de Sestao se llevaron su tanda con un gran dominio desde la primera palada, mientras que vecinas Portugalete y Zierbena ejercieron de escuderos, aunque sin poder disputar en ningún momento la victoria parcial.

La tanda intermedia registró un excelente comportamiento de Orio, que busca un sitio que todavía no tiene claro si se ubica entre las mejores o con el grupo que aspira a serlo, marcó un ritmo sostenido con el que superó a San Juan que bogaba en casa para hacer tercero en la general.