BILBAO. Jon Rahm acabó quinto en el BMW Championship, su sexto Top 10 en los últimos siete torneos -en el otro fue undécimo- , y pese a ello perdió un puesto en la FedEx Cup de cara al Tour Championship de esta semana en Atlanta. Ganar estaba imposible ya que salía a ocho golpes de Justin Thomas después de que el estadounidense destrozara la víspera el récord del Medinah Country Club con once bajo par y ayer manejara su amplia ventaja sin problemas para ganar con -25. El de Barrika hizo todo lo que estuvo en su mano en un día con mucho en juego. Un global de -16 ratifica su consistencia desde hace dos meses y habría sido ganador muchas semanas, pero en esta el campo ha sido muy amigable con los jugadores.

Solo dejó de coger un par de greenes en regulación, pero la bola de Rahm no terminó de reposar cerca del agujero y la mayoría de sus oportunidades de birdie fueron bastante lejanas y con pocas posibilidades de conversión. Así, no pudo enganchar esa racha que necesitaba para acercarse al liderato o, al menos, al segundo puesto que llegó a ocupar compartido tras su birdie en el hoyo 7. Solo pudo limar dos golpes a los cuatro pares 5 y algunos putts cercanos también se le fueron, como uno en el 15 cuando podía dar un salto. En cambio, había metido uno en el hoyo 9 desde doce metros, aunque en general le faltó más precisión con los hierros. Su vuelta estaba hecha cuando en el par 3 del 17 cometió un error y se fue al agua. Salió con su único bogey, aunque a esas alturas un puesto arriba o abajo poco importaba.

Patrick Cantlay apretó a Thomas en el partido estelar y llegó a 21 bajo par, aunque solo le sirvió para ser segundo. Como de nuevo Matsuyama firmó otra enorme vuelta de nueve bajo par y Finau luchó hasta el final, los cuatro sobrepasaron a Rahm, que tuvo que conformarse con el quinto puesto, que le llevará a salir en Atlanta a seis golpes de Justin Thomas, que logró su primer triunfo del año y lidera la FedEx Cup.