Bera Bera26

Zuazo25

SUPER AMARA BERA BERA: Arruda, Etxeberria (2), Cardoso (6), Menéndez (4), Terés, Azurmendi, Gil (3), Arrojeria (4), Karsten (5), Berasategi, Ezkurdia (1), Arderius (1) y Castellanos.

HGB PROSETECNISA ZUAZO: Aallá, Blázquez, Loidi (3), Hernández (8), Sánchez (2), Manrique (3), Valdivia (1), Bengoetxea (3), Encina (2), De Andrés, Gil (1), Erauskin (2) Y Muñiz.

Parciales: 2-2, 5-4, 8-6, 10-8, 13-10, 18-13 (al descanso) 21-13, 21-14, 22-19, 24-22, 25-23 y 26-25.

Árbitros: Muro e Iniesta. Excluyeron a Menéndez (2) y Azurmendi por Super Amara; y a Loidi, Sánchez y Blázquez por Zuazo.

bilbao - El Hotel Gran Bilbao Prosetecnisa Zuazo demostró ayer lo que vale. Que su situación en la tabla, noveno, no hace justicia a su calidad. Que la juventud pasa factura al inicio, pero que lo compensa con un balonmano muy divertido. Porque ayer el Zuazo estuvo a punto de dar un revolcón a la Liga Iberdrola. Casi rozó la sorpresa en Bidebieta, donde perdió por la mínima ante un Super Amara Bera Bera que se juega la Liga. Y que ayer por poco la tira. De hecho, el equipo donostiarra ganó de milagro y, a falta de dos jornadas, se coloca como líder provisional, empatado a puntos con el RoCasa Gran Canaria. El equipo insular, flamante campeón de la Challenge Cup, cuenta con un partido menos -que disputará el próximo día 15 ante el Gijón-, por ello, aunque el gol average es del Bera Bera, las azules rezan por un tropiezo canario.

Sin embargo, ayer fueron ellas las que estuvieron a punto de besar el suelo. Se confiaron ante un Zuazo que iba perdiendo por ocho tantos, pero se vieron obligadas a sacar la artillería. A colocar los cañones, mostrar los arqueros y afilar las espadas. Tiraron de una Silvia Arderius en plena forma, pero que estaba reservada para otras empresas, y de una Renata Lais que se está convirtiendo en la sensación de la temporada bajo palos. Tiraron de sus mejores armas y, aún así, ganaron por ayuda divina.

Y eso que el encuentro se puso del lado donostiarra en la primera parte. Tras unos primeros parciales igualados, de tanteo, las líderes provisionales supieron hacer daño a la defensa abierta que planteó el Zuazo. En ataque fueron letales. Unas asesinas. Así que de nada sirvieron los ocho tantos que consiguió Ainhoa Hernández. La barakaldarra fue el faro del Zuazo desde el pivote, conectó con sus compañeras y fusiló a Lais. Pero las rojinegras se fueron al descanso seis goles abajo.

El inicio de la segunda mitad pareció aclarar la victoria del Bera Bera. Las donostiarras abrieron la brecha más amplia del partido, ocho tantos, nada más salir de los vestuarios. Pero entonces la luz se marchó, las ideas huyeron y la noche albergó todos sus horrores. La efectividad azul menguó hasta el absurdo. La portería del Zuazo se hizo pequeña, o más bien Aalla se volvió gigante. Los ataques del Bera Bera no prosperaron y entonces fueron las rojinegras quienes lucieron sus blasones. Se acercaron en el marcador, llevaron el nerviosismo a Bidebieta y provocaron un final de infarto. Divertido, sí, pero de infarto. Erauskin puso al Zuazo a uno. Sánchez y Bengoetxea respondieron al Bera Bera. Y, cuando las fabriles tuvieron balón para empatar, para arañar un punto y revolver la Liga Iberdrola, Lais regresó para mantener al Bera Bera en la lucha.