En el minuto 57 de la semifinal de la Eurocopa disputada entre España y Francia, el Athletic se convirtió en el club más representado del partido junto al Paris Saint-Germain. Esto sucedió cuando Luis de la Fuente decidió dar entrada desde el banquillo a Dani Vivian –que hasta la fecha solo había participado en el encuentro frente a Albania– en sustitución de Jesús Navas, que tuvo que solicitar el cambio tras sufrir problemas físicos que le impedían continuar. El central se reunió sobre el terreno de juego con Nico Williams y Unai Simón, que actuaron como titulares, como ha sucedido durante el torneo con una sola excepción, la de la cita contra Albania, cuando el seleccionador estatal optó por dar descanso a todos sus jugadores predilectos salvo a Aymeric Laporte.

El Athletic dejó mayor huella si cabe que el PSG, que congregó al mismo tiempo sobre el césped a Randal Kolo Muani, Ousmane Dembélé y Fabián Ruiz, dado que sus tres leones alcanzaron una victoria que les permitirá jugar por el título en la final del próximo domingo, donde se medirán al vencedor del duelo que mañana enfrentará a Países Bajos e Inglaterra.

Nico era foco de muchas miradas gracias a que venía siendo uno de los jugadores más destacados de la competición. El extremo entró con buen pie en el partido y protagonizó la primera acción de ataque filtrando un balón al hueco hacia Fabián. Pero igual de temprano se pudo ver que no lo tendría nada sencillo. Didier Deschamps puso especial atención a su marca. Nico, maniatado, apenas dispuso de espacios para desplegar sus alas. Jules Koundé era su sombra y gozaba de buenos aliados que ofrecían coberturas. Francia era el plantel menos goleado hasta la semifinal, con un tanto encajado, de penalti.

Nico tuvo que jugar muchos balones al primer toque. Gozó de pocas ocasiones para encarar. Las actuaciones de los días previos hicieron que su sola presencia resultase intimidante, obligando a tenerle controlado y esto junto al hecho de que buscó estar pegado a la línea de cal permitió a España gozar de espacios interiores como los que propiciaron los goles.

Pareció haber asimilado bien Nico las instrucciones de un De la Fuente que también le pidió desplazamientos hacia zonas interiores que permitieron abrir pasillos para las incorporaciones de Marc Cucurella. Era día para no escatimar en esfuerzos y a Nico le tocó trabajar especialmente en tareas defensivas. El plantel galo encontró en Dembélé a su jugador más incisivo, de modo que Nico tuvo que ser solidario con Cucurella.

Segunda parte

La segunda mitad parecía un escenario más propicio para el estilo de Nico, con una Francia obligada a adelantar líneas en busca del empate. Entonces Nico adquirió protagonismo lanzando desmarques para captar balones largos. De hecho, esto sucedió en la primera jugada de la segunda mitad, cuando un desplazamiento en largo buscando el espacio obligó a Mike Maignan a salir de su área para, apurado, impedir que Nico encarase en solitario la portería rival.

A diferencia de contra Alemania, esta vez De la Fuente le mantuvo en el campo hasta el último suspiro buscando explotar su velocidad. Fue sustituido en el 93’ por Martín Zubimendi. Nico no lució como otros días, pero su sola presencia intimida, atrae rivales y genera espacios para otros.

Simón no pudo hacer nada para detener el remate de cabeza de Kolo Muani que adelantó a los galos. El portero apenas tocó el balón en la primera parte, lo que sí sucedió en la segunda, cuando la tropa de Deschamps se lanzó al ataque. El portero transmitió seguridad y buen posicionamiento atajando diversos disparos, aunque la mayoría fueron centrados. Brilló especialmente con la salida de balón con los pies, siendo preciso y adoptando buenas decisiones.

Vivian, mientras, se vio ante la compleja labor de detener las ofensivas de una poderosa Francia, teniendo que lidiar con su estrella, Kylian Mbappé, que buscó las costuras. El central mostró solidez, sobre todo en el juego aéreo, faceta en la que sufrió España, y templanza, dando la sensación de que su cuarto partido como internacional eran muchos más. Tras dejar huella en la semifinal, los tres leones tendrán ahora la ocasión de sumar el segundo título del curso tras la Copa alcanzada con el Athletic.