El Barakaldo vive momentos complicados en el matiz deportivo, una vez que ocupa la última plaza en el grupo II de Segunda División B, una crisis que también se detectan en el capítulo económico, debido a la deuda que tiene contraída con la Seguridad Social, que se eleva a 1,2 millones de euros y que desveló DEIA.

El 13 de noviembre de 2019 tuvo que entrar en concurso de acreedores debido a esa carga financiera, pero ha logrado salir del mismo 15 meses después, con lo que la Junta Gestora que preside Jesús Mari Isusi supera el primer match-ball.

Según al auto del Juzgado de lo Mercantil Nº1 de Bilbao, firmado el 9 de febrero de 2021 por la letrada Fernanda Abiega, "se proclama que las adhesiones realizadas a propuesta de convenio presentada y admitida a trámite alcanzan la mayoría legalmente exigida para considerar aceptada la propuesta", por lo que el Barakaldo cumple los requisitos exigidos para salir del concurso de acreedores, a la espera de que la sentencia sea firme pasado el periodo de diez días hábiles para presentar alegaciones a la resolución.

La Junta de Isusi, por tanto, iniciará pasado este periodo de alegaciones el proceso de transformación del Barakaldo en sociedad anónima, según el mandato de su Asamblea de Socios, que partiría con un capital social de unos 2 millones de euros. Son varios los grupos de inversores que han mostrado interés en la entidad de Ezkerraldea, con la que ya han abierto cauces de negociación.