La agónica situación deportiva por la que pasa el Barakaldo se cobró el lunes su primera víctima. El club fabril y Aitor Larrazabal llegaron a un acuerdo por el cual el técnico de Loiu deja de ser entrenador gualdinegro, aunque continuará ejerciendo como director deportivo de la entidad. El exjugador Germán Beltrán, que hasta ahora había ejercido como segundo entrenador de la plantilla, cogió las riendas del equipo en el entrenamiento matutino celebrado en Lasesarre, tal como rezaba el escueto comunicado emitido por el club, que añadía que esta medida busca "un revulsivo en la actual situación de resultados negativos".

Un cambio que se veía venir como algo inevitable toda vez que el Barakaldo ocupa el farolillo rojo de su subgrupo a falta de doce partidos para el final de la competición. Una sola victoria, obtenida hace dos semanas ante el Alavés B, y un único empate ante el Arenas han sido todo el bagaje de un Barakaldo que, con cuatro puntos en ocho partidos disputados, se encuentra a ocho puntos de la salvación y de caer a lo que sería la quinta división del fútbol estatal toda vez que se reestructuren las categorías de bronce.

Un panorama muy diferente de lo dibujado durante la pretemporada, cuando el objetivo que manejaba el técnico ahora relegado no era otro que el de disputar las plazas punteras. Y todo ello en medio de la encrucijada institucional en que se encuentra inmerso el club, con el pago de una multa de más de un millón de euros para regularizar su situación con la Seguridad Social y con la conversión en SAD en el horizonte. A nada de ello ayudaría un descenso de dos categorías que ahora mismo, de no mejorar mucho las cosas, parece a la vuelta de la esquina.

Así pues, la junta gestora encabezada por Jesús María Isusi , que hoy comparece ante los medios para dar cuenta de la situación, parece haber querido aprovechar el parón de la competición para cambiar el puesto de entrenador, pero no la de la dirección deportiva, en la que sí seguirá Larrazabal. Germán Beltrán, exjugador gualdinegro entre 2004 y 2008, cuando erró el penalti que hubiera supuesto el ascenso del Barakaldo a Segunda División, se hizo ayer mismo con las riendas de la plantilla gualdinegra en lo que supondrá su mayor reto en su carrera como entrenador. Tras comenzar en 2016 como segundo entrenador en el Portugalete con Ibon Etxebarrieta, Carlos Docando y Aitor Calle llegó al Barakaldo precisamente de la mano de Aitor Larrazabal en 2018. Tras la clasificación para el play-off en que el Hércules se cruzó en el camino de los de Lasesarre, fue también mano derecha de Hernán Pérez la también difícil pasada temporada.