REAL MADRID: Courtois; Odriozola (Min. 57, Carvajal), Varane, Sergio Ramos, Marcelo; Casemiro, Fede Valverde, Modric, Isco (Min. 57, Marco Asensio); Jovic (Min. 57, Vinicius) y Benzema (Min. 87, Borja Mayoral).

VALLADOLID: Roberto; Hervías, Bruno, Javi Sánchez, Carnero; Óscar Plano, Míchel (Min. 86, El Yamiq), San Emeterio (Min. 63, Marco André), Waldo; Orellana (Min. 63, Kike Pérez) y Weissman (Min. 74Guardiola).

Gol: 1-0: Min. 65; Vinicius.

Árbitro: César Soto Grado (colegio riojano). Amonestó a Casemiro y Marcelo por el Real Madrid; y a Bruno por el Valladolid.

Incidencias: Alfredo di Stéfano, sin público.

La entrada en escena del brasileño Vinicius desatascó a un Real Madrid repleto de dudas, amparado en las decisivas intervenciones de Thibaut Courtois y perdido en las pruebas tácticas de Zinedine Zidane que insistió sin éxito con Luka Jovic ante un Real Valladolid que acarició mejor suerte.

Para colmo, el belga Eden Hazard, que iba a reaparecer por fin, no pudo hacerlo por culpa de una lesión muscular en su pierna derecha. Después de completar una pretemporada con trabajo específico de potenciación del tobillo derecho operado, Hazard se sumó la pasada semana a la dinámica de grupo y estaba convocado por Zinedine Zidane para regresar a los terrenos de juego.

La ausencia de Eden Hazard y la poca fe en Vinicius, le aleja al técnico de su clásico 1-4-3-3. Intenta encajar el rombo por las virtudes de Isco que apareció titular ante el Real Valladolid alejado de su identidad o Martin Odegaard, para jugar con dos puntas que no terminan de encajar. Es difícil no complementarse con Karim Benzema pero Luka Jovic no lo consigue.

El Real Madrid obtiene la posesión pero carece de finalización. Por momentos es previsible, sin meterle riesgo ni vértigo a su fútbol. Impreciso con el balón. Capaz de ser frenado por un poco de orden del rival, estando bien colocado como el equipo de Sergio, le sobró para torpedear al equipo madridista.

No sufrió en el primer acto el Valladolid, salvado por un paradón de Roberto Jiménez a Fede Valverde en su único desajuste y tranquilo ante la falta de puntería de un matador que perdió el gol. Jovic la tuvo como la desean todos los nueves y la mandó al limbo.

Los porteros se convirtieron en los protagonistas porque a Roberto le respondía Courtois con una de esas intervenciones que dan puntos. Perdonó Waldo de disparo cruzado y segundos después Weismann tras un error de Varane en salida de balón. Su disparo abajo con intención lo salvó una mano abajo del belga, el mejor de un Madrid discreto.

Fue la acción que hizo reaccionar a Zidane. Antes de lo que acostumbra. Con un triple cambio que dejaba claro que no le gustaba lo que veía. La aparición de extremos con Marco Asensio y Vinicius. Las ganas del brasileño un día después de cumplirse dos años de su debut. Robó a Bruno en el inicio de jugada y acabó encontrando el pase del mismo defensor rival para definir sin pensarlo para no fallar.