El Barakado volvió ayer a la acción aunque en forma de Asamblea de Socios, una Junta organizada en el campo de Lasesarre con estrictas medidas de seguridad. Los masa social del club gualdinegro protagonizó una tranquila asamblea en que casi todo se aprobó por unanimidad. Únicamente se registraron cinco abstenciones en el capítulo de la aprobación de las cuentas de la campaña 2018-19, unas cuentas con “reajustes”, tal y como señaló el presidente Jesús María Isusi. Dichos reajustes se corresponden con lo que ha podido comprobar la auditoría externa, que, por su parte, señaló varias posibles irregularidades cometidas por la anterior Junta. Entre ellas figurarían las siguientes: falta de justificación de gastos e ingresos, nóminas incorrectas, contratos de jugadores y de patrocinadores inexistentes y un largo etcétera.

En lo referente a las cuentas de la pasada campaña y al presupuesto de la siguiente, que asciende a 875.000 euros, ambos fueron aprobados de forma unánime. El presidente de la gestora puntualizó que es una cuantía que asegura la “competitividad del primer equipo”.

Los presupuestos incluyen una nueva propuesta tanto de captación, incluyendo la posibilidad de bonificar a parejas de abonados, como de renovación de socios. En ambos casos el ahorro es notable con respecto al anterior sistema.

Por último, y en lo referido al concurso de acreedores, el administrador concursal, Carlos Ais, transmitió optimismo y anunció que en septiembre se abre una fase de acuerdo con la Seguridad Social.