Bilbao - Un histórico del fútbol estatal como el Hércules será el primero de los tres escollos que deberá superar el Barakaldo para poder retornar a Segunda División, categoría en la que militó por última vez en la temporada 1980-81. Así lo deparó el sorteo celebrado ayer en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, donde también se sorteó la primera fase del play-off de ascenso a Segunda B, en el que toman parte Portugalete y Sestao River.

Los de La Florida se medirán en la eliminatoria de campeones al Llagostera, mientras que los de Las Llanas lucharán contra el Toledo por colarse en segunda ronda. Los exfutbolistas Joan Capdevilla, Albert Luque y Julio Baptista fueron los encargados de extraer las bolas de los vizcainos, emparejados con rivales de postín.

Al acabar la liga en cuarta posición, el Barakaldo afrontará la ida en Lasesarre este fin de semana. Los de Larrazabal, que también tenían como posibles rivales a la Ponferradina de Bolo y al Cartagena, se las verán con el segundo clasificado del grupo III, solo superado por el Atlético Baleares.

Los alicantinos, entrenados por Lluís Planagumà, militaron en Primera a comienzos de la década actual y en su plantilla destaca la presencia del veterano portero Ismael Falcón. A modo de conjura para lo que viene, plantilla y cuerpo técnico acudirán a una parrillada popular organizada por Baraka Berria Elkartea que se celebrará mañana a las 19.30 horas en la plaza Bide Onera.

Rival duro para el portu El que tiene más opciones de alcanzar el éxito, por su condición de campeón, es el Portugalete, que subirá a Segunda B si se impone al Llagostera, el mejor clasificado del potente grupo catalán. En caso de perder, entrará en el bombo de segunda ronda y podrá seguir aspirando al ascenso, como ya le ocurrió el pasado curso a una Cultural que acabó consiguiendo el objetivo. En la ida se desplazarán al estadio del equipo gerundense, que entre 2014 y 2016 jugó dos escalones por encima, en Segunda.

El duelo decisivo lo afrontarán en La Florida. Por su parte, el Sestao River, tras acabar el campeonato regular en segundo lugar, iniciará la eliminatoria fuera y disputará la vuelta en Las Llanas. Se medirá al cuarto del grupo de Castilla-La Mancha, un Toledo habituado a militar en categorías más altas. De hecho, los entrenados desde noviembre por Manu Calleja, el que fuera técnico de Portugalete y Balmaseda, descendieron a Tercera el pasado curso.

Debido al tema de los arrastres, el fútbol vizcaino estará pendiente de lo que suceda con el Real Unión en la promoción por la permanencia en Segunda B, en la que se enfrentará al Jumilla, con la ida en territorio murciano y la vuelta en Irun.

Por su parte, el Alavés B se medirá al Compostela, y el San Ignacio tendrá como rival al equipo asturiano de Marino de Luanco. - J. Baraja