Russell Westbrook hizo historia en la NBA en la madrugada del domingo al firmar ante Indiana Pacers el triple-doble número 181 de su carrera profesional, registro con el que iguala el récord histórico que estaba en manos del mítico Oscar Robertson. El base de los Washington Wizards acabó el encuentro con 33 puntos, 15 rebotes y 13 asistencias y logró además la jugada que sentenció el partido en la prórroga, con un tapón sobre la bocina a lanzamiento de Caris LeVert. Justo antes, metió los tiros libres que colocaron el 132-133 final y que sitúan a su equipo en la novena posición de la Conferencia Este.
Westbrook, una de las figuras más polarizadoras de la competición estadounidense, tiene asegurado además promediar por cuarta vez en su carrera un triple-doble durante toda una temporada (2017, 2018, 2019 y 2021), algo que solo había logrado el propio Robertson una vez (1962). El base californiano, MVP de la NBA en 2017 y nueve veces All Star, promedia este curso 21,8 puntos, 11,4 rebotes y otras tantas asistencias. Podría firmar un cero en las tres categorías en los partidos de campaña regular que quedan e incluso así acabaría en dobles dígitos en todas ellas.
La marca de 181 triples-dobles en posesión de Big O hasta ayer gana en prestigio cuando se compara con los firmados a lo largo de sus trayectorias por jugadores como Magic Johnson (138) o LeBron James (99). El propio Robertson aseguró a la conclusión del partido su satisfacción por el hecho de que haya sido Westbrook el que iguale, y en breve supere, su plusmarca: “No podría estar más feliz al respecto. Espero y deseo de verdad que él me supere. Disfruto enormemente la forma de jugar de Westbrook. Es un jugador dinámico que contagia su energía allá por donde va. Creo que es uno de los grandes bases de la NBA. En Washington ha hecho un trabajo excepcional”.
