Valencia Basket66

Lointek Gernika63

VALENCIA BASKET: Gómez (9), Casas (8), Pina (10), Abalde (6), Tirera (2) -cinco inicial-, Gari (0), Lizarazu (2), Romero (3), Brown (8) y Reisingerova (18).

LOINTEK GERNIKA: Ocete (9), Dietrick (5), Wojta (13), Roundtree (3), Milic (18) -cinco inicial-, Lo (6), Díez (3), Arrojo (4), Molina (0), Mazyonite (2) y Ariztimuño (0).

Parciales: 12-14, 34-30 (descanso), 44-48, 56-56 (final) y 66-63.

Árbitro: Palomo, Franquesa y Aranzana. Eliminaron a Tirera y Reisingerova, del Valencia.

Incidencias: 2.718 espectadores en la Fuente de San Luis.

bilbao - Pese a estar aún en el amanecer de la temporada y que todavía hay muchísimo por jugarse, el encuentro de ayer entre el Lointek Gernika y el Valencia tuvo sabor a choque clave. Dos equipos que saben que su objetivo está en la parte alta de la tabla y que el encuentro disputado en la Fonteta puede ser decisivo en el desenlace de la liga regular. Ambos conjuntos se exprimieron al máximo y solo en la prórroga y con un ajustado resultado de 66-63 pudieron las valencianas llevarse la victoria. Fue uno de esos encuentros de pizarra. Estrategias diferentes y juegos de ajedrez constantes entre los dos técnicos. Pero la táctica no menguó la intensidad. Cada balón fue perseguido con ansia y las defensas se exprimieron al límite. El Gernika llevó la iniciativa en los primeros 35 minutos e incluso tuvo varias oportunidades para romper definitivamente el partido. Sin embargo, en estos choques donde cada mínimo detalle pesa demasiado y es capaz de desequilibrarlo todo, perdonar se paga muy caro y a las gernikarras se le escapó el triunfo de las manos.

Las faltas personales de las dos cincos del Valencia marcaron el signo del partido. Tirera realizó la quinta personal muy pronto y Reisingerova, un martirio para las gernikarras, tuvo que ver limitada su defensa desde el cuarto periodo al cometer la penúltima falta permitida. Lo que parecía una situación beneficiosa para el Gernika se convirtió en el principio de su condena. Al Valencia no le quedó mas remedio que meterse en zona para proteger a su pívot y en esa medida desesperada encontró la solución que le dio el partido. Fue un déjà vu de lo sucedido en la anterior derrota del conjunto vizcaino. Las valencianas se colocaron en zona y el ataque de las entrenadas por Mario López quedó cortocircuitado. Los fantasmas resurgieron y el Gernika apenas encontró soluciones para anotar ante la cerrada defensa valenciana. El partido huyó mientras las vizcainas chocaron contra un muro ya conocido.

Fue una dura derrota, más vistas las circunstancias en las que se produjo. Sin embargo, el Gernika batalló hasta la última posesión en la Fonteta, una de las pistas más complicadas de la competición. El Valencia es un equipo que apuesta fuerte por el baloncesto femenino y no solo se ve en su plantilla llena de estrellas. También el público sigue a sus jugadoras y es una de las canchas con más afluencia de la Liga Femenina. Ayer, en el choque ante el Gernika cerca de tres mil espectadores apoyaron a las locales. Las gernikarras, ya con muchas experiencias en su mochila, tiraron de experiencia y supieron competir con mucha entereza en ese ambiente hostil, sin verse en ningún momento superadas.

El Gernika incluso fue capaz de acallar la Fonteta con su buen inicio. Las defensas se impusieron claramente en los primeros ataques, pero el conjunto foral fue capaz de meter una marcha más a su juego y lograr las primeras ventajas. Ocete ejerció de maestra de ceremonias y empezó a repartir asistencias a toda velocidad, sobre todo a Milic. La pívot serbia destacó en los primeros minutos y la defensa del Valencia no tuvo armas para detenerla. Con esta combinación, las gernikarras lograron marcharse hasta el 8-12, distancia que logró aumentarse en el segundo cuarto gracias a una grandísima defensa que permitió que el Gernika mandara por ocho puntos (20-28).

El Valencia monopolizó todo su ataque en Reisingerova y la pívot checa respondió con puntos en la pintura. Una actuación que se pudo haber ido a cotas estratosféricas si no llega a ser por la defensa de Lo, que minimizó el buen hacer de la interior local. Sin embargo, el Valencia encontró soluciones y se quitó todos los miedos. Las gernikarras vivieron sus peores minutos y además la suerte tampoco ejerció de salvadora ante los problemas en el juego. Varias acciones desafortunadas dieron canastas fáciles a las valencianas y Casas cerró la primera parte con una canasta sencilla que puso el 34-30 en el marcador.

El Gernika no se vino abajo con la reacción local. Nada más salir del vestuario Wojta puso patas arriba el encuentro con siete puntos casi consecutivos. Mientras el resto de jugadoras se asentaban en la cancha, la norteamericana volaba a toda velocidad de una canasta a otra y fue clave en el parcial de 0-9. El Gernika cada vez se sintió más cómodo y llegó a mandar por nueve puntos. En esa situación, un triple de Naiara Díez se salió de dentro y varios tiros liberados tampoco entraron dando vida al Valencia. Entonces llegó la cuarta de Resingerova, la locales se pusieron en zona y todo se torció.

parcial de 12-0 El Valencia consiguió un parcial de 12-0 que puso el 56-53 a falta de poco más de un minuto para terminar el encuentro. Un dos más uno de Milic igualó el marcador y tras una buena defensa Roundtree tuvo la oportunidad de desempatar pero se le escapó el balón. En la última jugada, Anna Gómez anotó un triple tras asistencia de María Pina, pero lo hizo fuera de tiempo por lo que el partido se fue a la prórroga. En el periodo extra, las valencianas llevaron la iniciativa, pero el Gernika se mantuvo vivo hasta el final. Con 66-63 en el marcador, las gernikarras decidieron no hacer falta en la última jugada, defendieron bien pero no cerraron el rebote y perdieron su oportunidad de realizar un último ataque de garantías.