Urdaibai vivió la regata de ayer en Getxo en una situación incómoda. Esa tierra de nadie que le obliga a mantener el ritmo para no llevarse sustos innecesarios pero solo le permite ser testigo de lujo de una batalla por la bandera en la que no estuvo invitados. Ese brillo con el que deslumbraron los bermeotarras la semana pasada apareció en fogonazos aislados y eso les dejó sin poder pelear por la bandera, con el único objetivo de minimizar daños y salvar el día para seguir en la lucha por la Corona. Donostiarra y Hondarribia estuvieron a otro nivel. Por delante desde las primeras paladas, sobre todo, la embarcación de la capital guipuzcoana. La Torrekua se reivindicó en aguas getxotarras y dejó claro que su candidatura es más que firme. Dominó la regata y solo en los metros finales vivió un pequeño susto por parte de la Ama Guadalupekoa, pero fue capaz de aguantar y asegurar el triunfo.

Desde la txanpa inicial quedó claro que ayer no era el día de Urdaibai. Los bermeotarras sufrieron mucho y no tardaron en dejarse rápidamente cinco segundos. Los tres botes guipuzcoanos de la tanda de honor bailaban en el mismo segundo, mientras los bermeotarras observaban y sufrían desde lejos. En esa pelea en la proa de la regata, Donostiarra comenzó a hacerse más fuerte e impuso un ritmo contundente. Orio cedió antes de la ciaboga y luego lo pagó, perdiendo muchos segundos hasta caer al cuarto lugar. Por su parte, Hondarribia se agarró hasta la maniobra, pero a partir de ahí empezó a dejarse segundos.

Sin una ola marcada, remontar la diferencia se hizo más complicado. Sin embargo, en Urdaibai tirar la toalla no es una opción. Este curso el primer golpe no es suficiente para noquearle y en Getxo también fue capaz de recomponerse. Donostiarra amenazó con marcharse, Urdaibai siguió apretando y llegó a colocarse a dos segundos, al igual que Hondarribia. Lamentablemente para sus intereses, fue su último momento dulce. A partir de ahí, los bermeotarras volvieron a sufrir en el nuevo campo getxotarra y se quedaron en la tercera posición. Por delante, la Torrekua consiguió una buena renta y solo en el largo final apareció la Ama Guadalupekoa para discutir la victoria donostiarra. Un intento final que acabó antes de tiempo y dejó a los hondarribitarras a un segundo de Donostiarra, pero con el liderato en su poder durante al menos un día más.

Otras tandas

Por otra parte, en las dos primeras tandas, el gran protagonista fue Kaiku. Los sestaoarras estuvieron a punto de meterse en los puestos de la tanda de honor al finalizar quintos a solo tres décimas de Orio. La Bizkaitarra vivió una pequeña batalla en las primeras paladas de la segunda tanda, pero luego cogió la proa y no paró de agrandar su distancia. Su principal rival fue el tiempo marcado en la primera tanda por Cabo, que ayer dio un paso importante hacia la salvación. Sin embargo, los entrenados por Jose Luis Korta también fueron capaces de batir ese registro.

Entre el resto de los vizcainos hubo más sombras que luces. Ondarroa consiguió un noveno puesto que le permitió abandonar el último puesto y coger algo de aire. Lekittarra fue décimo y Santurtzi se metió en un serio problema al finalizar en último lugar y ver como todos sus perseguidores daban un importante salto en la tabla. Tampoco acabaron contentos en Zierbena. Los galipos buscan una reacción que les permita acercarse a la tanda de honor, su objetivo al principio del curso, pero en Getxo dieron un paso atrás. Muy lejos de Kaiku en la segunda tanda, fueron incluso superados por Getaria en la txanpa final y cayeron hasta el octavo lugar.