Una temporada maravillosa para Aspe
Aspe triunfa en las tres citas oficiales de la campaña y valora “el cambio generacional” y su consolidación
Bilbao - Una dejada al txoko de Jokin Altuna fue el final de la temporada invernal de la pelota a mano profesional. Con la txapela conseguida por el pelotari de Amezketa, doble campeón individual a los 22 años, comienza a desanudarse el inicio del verano, al que accederán los pelotaris de Aspe y Asegarce una vez hayan regresado de sus vacaciones la próxima semana. Para abrir boca, el segundo fin de semana de junio la Liga de Empresas volverá a poner en juego el Torneo ETB-LEP.M de Promesas, en el que vestirán de blanco a sus mejores pelotaris convenidos con la intención de valorar su nivel y su posible futuro. Será una prueba de fuego de cara a posibles novedades. El año pasado ganaron el riojano Javier Zabala y el vizcaino Oier Etxebarria.
Una vez terminado el curso de lana, que descorcha el Cuatro y Medio, Aspe se ha encontrado con una temporada maravillosa. La empresa de Eibar se ha calado las tres txapelas oficiales puestas en juego, con el doble regusto de Altuna III en las competiciones individuales y la confirmación de Ezkurdia-Zabaleta en el Parejas. “Los títulos suponen una gran alegría para la empresa. Este año las tres txapelas han caído para Aspe y estamos muy contentos. De cualquier modo, sigo pensando que lo más importante es que hemos conseguido hacer un cambio generacional estupendo. Aunque este año Irribarria no ha tenido suerte, va a estar arriba muchos años, Elezkano II y Ezkurdia han dado un paso al frente, Rezusta sigue arriba y Altuna acaba de sacar el título individual”, relata Inaxio Errandonea, director comercial de la operadora guipuzcoana, quien agrega que “estamos hablando de deportistas que no llegan siquiera a los 25 años de edad. Está el caso de Joseba, que tiene 27, pero el resto son muy jóvenes. Estamos encantados”.
Y es que, a pesar de los tronos logrados en una campaña exitosa, desde Aspe valoran la respuesta de los jóvenes sobre todo lo demás. “Hemos seguido a estos manistas desde que eran niños. Siempre hemos pensado que iban a ser figuras”, afirma el de Bera, quien agrega que “cuando Martínez de Irujo se vio obligado a dejar de jugar, salió Irribarria. Pensábamos que iba a estar arriba, pero nos llamó la atención su juventud”. Además, Errandonea añade que “quizás Altuna ha sorprendido en el mano a mano. Me he cansado de escuchar que Jokin era un pelotari del Cuatro y Medio y Parejas, pero los técnicos de la empresa ya nos decían el año pasado que había que tener cuidado con él, aunque luego en la cancha no le salieron las cosas. Este curso ha aprendido a asumir la responsabilidad”.
De este modo, el exprofesional recuerda a la generación anterior, con la que ve un paralelismo importante. “Fue una irrupción que generó un gran ramillete de aspirantes a las txapelas. Después, Irujo y Olaizola II fueron los que se quedaron como capos. Tras los nombrados, en Asegarce también están Arteaga II, Laso o Víctor y Jaka, en nuestra plantilla, empieza a enseñar cosas. Se trata de una camada ilusionante”, analiza el director comercial de Aspe.
Por otro lado, durante las semanas previas a la final del Manomanista se registró un gran volumen de petición de entradas, que se acercó a la expectación de las grandes finales entre Olaizola II y Martínez de Irujo. “Aimar es un pelotari histórico, de lo mejor que ha habido en los últimos años. El veterano que se enfrenta con el que viene con fuerza es un duelo que apetecía ver. Hubo mucha expectación”, desgrana Errandonea, quien finaliza que la mejor noticia es que “la pelota está muy viva. Da una alegría enorme cuando sale esta gente joven”.