LUCAS Eguibar (Donostia, 1994) tiene 23 años, pero ya es todo un exitoso veterano en el circuito de snowboard cross (modalidad que consiste en bajar por un trazado con curvas, saltos y obstáculos en el menor tiempo posible). Fue campeón mundial junior en 2013, diploma olímpico en los Juegos de Sochi en 2014 y besó el Globo de Cristal que le acreditaba como vencedor de la Copa del Mundo en 2015. Así que no es de extrañar que, pese a su juventud, sea uno de los principales favoritos para colgarse una medalla en el Mundial que se está celebrando en Sierra Nevada hasta el día 19. “Es mi gran reto de este año, he centrado los entrenamientos en este momento, así que voy a ir a por todas”, comenta. Sin embargo, la cita mundialista no le trae buenos recuerdos al guipuzcoano, que asegura que “en el pasado no me fue bien” en esta competición, aunque recuerda que “todavía soy joven dentro de una disciplina donde la mayoría ronda la treintena”. “No he tenido muy buenos Mundiales hasta el momento, pero todavía estoy aprendiendo, me queda mucho por delante. Por eso sé que estoy entrenando bien y que puedo hacerlo”, declara. Por esta razón, Eguibar no se pone límites: “Me faltan muchas cosas por ganar y la medalla en el Mundial la tengo pendiente. Espero estar en lo más alto”. De momento, mañana le esperan las clasificatorias de su disciplina (10.20 horas) y el domingo (12.00) la gran final.

Con todo, el donostiarra llega a Sierra Nevada tras renunciar el pasado fin de semana a la final de La Molina (Granada), la penúltima parada del circuito internacional de la Copa del Mundo y una de sus estaciones favoritas. Un fuerte dolor de espalda le impidió estar en el portillón de salida y las alarmas se encendieron ante la proximidad del Mundial. A pesar de ello, Eguibar calma los peores augurios y afirma estar “motivado y alegre” y ser capaz de “llegar en buenas condiciones a la carrera” de Sierra Nevada: “Esta pretemporada me encontraron una protrusión en la espalda, que me dio un aviso antes de La Molina. Tenía mucha sobrecarga, por eso decidí no correr y reservarme para el Mundial. Creo que fue algo positivo porque he podido descansar, trabajar con los fisioterapeutas y ya me encuentro mucho mejor”. De hecho, el guipuzcoano llega a la ansiada cita con la moral bien alta, después del segundo puesto conseguido en la prueba de la Copa del Mundo de Felderg. Una brillante actuación le llevó hasta el subcampeonato del evento alemán, donde la única que pudo arrebatarle el triunfo fue la foto finish, que le otorgó finalmente la victoria al francés Pierre Vaultier. “Necesitaba este buen resultado porque me estaban saliendo carreras malas y los rivales me sacaron muchos puntos al comienzo del campeonato, pero este segundo puesto me permite ver que si tengo el día, puedo estar delante. Voy hacia arriba”, afirma.

Sin embargo, tras la plata en Felderg, en la segunda prueba disputada sobre el mismo escenario alemán, Eguibar sufrió una aparatosa caída que le dejó fuera de la lucha por el triunfo. El rider guipuzcoano, en pleno descenso, marchaba en tercera posición y en la pugna por el segundo puesto se fue al suelo, abandonando la competición en los octavos de final. “Este deporte es así, al ir todos juntos (en snowboard cross se compite de 4 en 4 o de 6 en 6) hay choques y caídas y en esa ocasión me tocó a mí irme al suelo”, explica. Por eso, el donostiarra reconoce también el importante factor que supone la suerte en su disciplina: “Esto es un poco lotería, tú puedes ser el mejor en lo tuyo, pero si tienes al lado a alguien que tiene su peor día, se cae y te da a ti, os vais los dos fuera”. A pesar de todo, Eguibar es optimista y llega al Mundial con ganas de medalla: “Ya he hecho muy buenas carreras, por qué no repetirlo en Sierra Nevada”.

Los Juegos Olímpicos “El Campeonato del Mundo es muy importante, pero lo es más si es previo a los Juegos Olímpicos”. Con esta frase, Eguibar reconoció estar ya pensando en la cita invernal de Pyeongchang que tendrá lugar el año que viene y que centra gran parte de su preparación. De hecho, el donostiarra reconoce que un buen papel en Sierra Nevada supondría dar un paso de gigante hacia el billete de los próximos Juegos. A pesar de todo, Eguibar no quiere correr más de lo necesario y, de momento, tan solo se centra en ser el más rápido en la clasificatoria a la que se enfrentará mañana. Y es que, en el Mundial, el vasco lidera a un equipo estatal compuesto por: Josito Aragón, Queralt Castellet, María Hidalgo y Aleix López en snowboard; Javier Lliso, Martín Romero y Marina Terrón en ski freestyle; y Regino Fernández, Laro Herrero y el propio Eguibar en boardercross.