Ricardo Uriz: “Apostamos por un ritmo alto y estamos en ese punto en que los tiros entran”
El base navarro suma saliendo desde el banquillo en la gran sorpresa del curso, que llega a Miribilla como una amenaza para el Bilbao Basket en la batalla por el ‘play-off’
bilbao - Ricardo Uriz (Iruña, 30-7-1980) se ha asentado en la Liga Endesa y en el Fuenlabrada, actual sexto clasificado, ha encontrado una oportunidad inesperada de jugar una Copa y de romper un registro curioso: es el jugador en activo con más partidos en la competición (336) que aún no ha disputado ninguno en el play-off por el título. “No era el objetivo, pero ahora no queremos parar”, advierte el exjugador del Bilbao Basket con el que ascendió a la ACB hace ya doce años.
El Montakit Fuenlabrada fue una sorpresa al final de la primera vuelta al meterse en la Copa, pero a estas alturas, después de 25 jornadas, ya ha dejado de serlo.
-Para nosotros está siendo una gran temporada, pero el objetivo no era otro que la permanencia. Entrar en la Copa fue un premio para todos, una alegría muy grande, y desde luego seguir en la situación en la que estamos es un sueño, pero no queremos quedarnos aquí, sino acabar de la mejor manera posible.
En el equipo solo quedó un jugador del año anterior, hubo once fichajes y un entrenador nuevo que cambió después de unas jornadas. ¿Cuál es la clave para que el rendimiento haya sido alto y no se haya resentido?
-La clave es que somos un equipo, en todo lo que significa ser un equipo. Hemos tenido también lesiones de jugadores importantes, pero el grupo siempre ha sabido avanzar porque ha habido otros jugadores que han sabido dar un paso adelante. Somos un equipo trabajador, ambicioso y peleón. No hay otro secreto para explicar las victorias.
El equipo descendió el año pasado y que hubiera tantos jugadores habrá ayudado a quitar la negatividad en el club y el entorno.
-Probablemente. Solo sigue un jugador, Roland Smits, los entrenadores también son nuevos porque el club decidió hacer una limpieza para eliminar las malas sensaciones y buscar otro tipo de juego y de exigencia. Zan Tabak fue el que formó la plantilla, pero la oferta del Maccabi Tel Aviv tenía que cogerla, era de las que no se puede rechazar. Con el cambio de entrenador y la llegada de Jota Cuspinera hubo un periodo de paréntesis, pero después de esos primeros partidos ha demostrado que tiene nivel suficiente para estar en esta liga.
En los partidos se les ve disfrutar con un estilo de juego alegre. Al Fuenlabrada no le cuesta meter puntos.
-Nuestro estilo trata de imponer un ritmo alto de juego, ser alegres como dices, y ahí radica la confianza que tiene el grupo. Estamos en ese punto en que los tiros entran y a los rivales les resulta complicado pararnos.
Además, parece que están jugando sin presión, disfrutando de un momento que algunos jugadores no habían vivido, pese a ser veteranos. Entre ellos, usted.
-Sí, es verdad. Es mi primera temporada aquí y personalmente lo estoy disfrutando, como lo está haciendo la afición que el año pasado lo pasó mal. Queremos ver dónde nos llevan esta confianza y esta ilusión. Estamos bien colocados, pero habrá que esperar hasta las últimas jornadas para ver a qué podemos aspirar.
La pasada temporada el Fuenlabrada apostó por dos bases jóvenes. Este año usted y Jonathan Tabu forman una pareja veterana. ¿Es importante en un puesto tan comprometido o que el equipo funcione es cuestión de todos?
-El club tenía claro que quería otro perfil de jugador en ese puesto y Jonathan y yo estamos tratando de aportar lo que buscaban. Pero es todo el grupo el que está haciendo que ganemos tantos partidos.
Al final, los veteranos siguen aportando en muchos equipos. ¿Es difícil para los jóvenes brillar en la Liga Endesa?
-Ser veterano te da un poso, una experiencia, un conocimiento que los jóvenes tienen que adquirir poco a poco. Eso lo dan los años. En el mismo Bilbao Basket Mumbrú, Raúl o Axel son gente de mucha calidad y, además, tiran del carro. Los jóvenes te aportan otras cosas y para que un equipo funcione tiene que haber un poco de todo.
En su caso, ve de cerca la posibilidad de jugar por primera el ‘play-off’.
-Bueno, quedan nueve jornadas y tenemos ahora un calendario difícil con partidos ante el Bilbao Basket, el Barcelona en casa y el Tenerife allí. Si ganamos uno de los tres, lo podremos ver más cerca. Si no, a seguir luchando porque de la ilusión también se vive.
Supongo que no esperaba estar en esta situación cuando llegó a Fuenlabrada.
-Claro, pero ni yo ni nadie. Al final, esta situación es difícil verla en un club como el Fuenlabrada. Todos los años hay alguna sorpresa y esta temporada nos ha tocado a nosotros. No queremos parar, queremos aprovechar este buen momento y para empezar, ponerle las cosa complicadas al Bilbao Basket.
Vienen de tres victorias seguidas fuera de casa y si ganan, abrirían un hueco muy importante con el Bilbao Basket.
-En caso de ganar, nos pondríamos muy bien tras ganar al Andorra, que también peleaba por estar entre los ocho primeros. Sabemos que estos duelos directos son importantes en esa lucha y ganar te pone todo de cara.
¿Cree que el Bilbao Basket puede acusar la presión por la obligación de ganar?
-No, ellos están acostumbrados a jugar este tipo de partidos y, normalmente, en casa no fallan. Es un equipo muy ambicioso que suele pelear por estos objetivos y a nosotros quizás nos falta esa experiencia. Ellos tienen las de ganar en ese sentido y creo que van a plantear un partido duro y exigente como siempre en Miribilla y nosotros debemos estar preparados para eso si queremos llegar al final con opciones de llevarnos la victoria.
¿Cómo está viendo la temporada del Bilbao Basket?
-En líneas generales, creo que es muy buena. Han jugado dos competiciones, con muchas novedades en la plantilla también, y pienso que han rendido muy bien, como demostró ese partidazo en la Copa ante el Barcelona en el que la afición del Bilbao Basket volvió a sentirse muy identificada con su equipo y volvió a disfrutar muchísimo. Creo que tiene muy buena plantilla y que van a estar entre los ocho primeros. Les auguro un buen presente y un buen futuro.
¿Y qué se plantea usted para ese futuro?
-Nada en concreto, un poco lo que vaya viniendo. Sé que ya tengo una edad (35 años) por lo que me gustaría poder seguir jugando a baloncesto y disfrutando donde esté.