El menor de los Iturraspe acorta los plazos de su recuperación

bilbao - Gorka Iturraspe está de vuelta. Es la segunda noticia positiva en la saga familiar en un intervalo de pocos días. Si Ander, el mayor, consumó su regreso con el primer equipo en Balaídos tras un mes y medio en el dique seco por culpa de una lesión de rodilla, es el turno de su hermano pequeño, que la semana pasada se incorporó de nuevo al Bilbao Athletic después de evitar la medida más drástica, el quirófano, para corregir sus problemas de cadera y acortar los plazos de recuperación, que se han reducido a tres meses.

Gorka está de nuevo a las órdenes de Cuco Ziganda, aunque su retorno a los campos aún debe esperar. De momento, se probará en la U21 Premier League, novedosa competición para el conjunto rojiblanco, que se medirá en dos semanas, el 8 de abril, al Oporto dentro de los cuartos de final. El de Matiena, de 20 años de edad, buscará coger ritmo en su deseo de tener minutos en el tramo final del curso con el filial rojiblanco, en el que solo ha podido participar en tres partidos en esta su primera campaña como cachorro.

El menor de los Iturraspe, un habitual toda la campaña pasada en el Basconia, ha dado esquinazo al peor de los escenarios, que apuntaban a seis meses de baja. Sus problemas de cadera, que le producían mucho dolor en los picos de mayor exigencia física, obligaron al equipo médico del Athletic a emprender diversos tratamientos. Tras aplicar un plan conservador, el jugador pasó por la consulta del prestigioso traumatólogo Mikel Sánchez, que le ha supervisado las diferentes sesiones de plasma en la zona afectada para paliar la dolencia, aunque ha resultado decisivo el paso por la consulta en Iruñea del fisio Jurdan Mendigutxia, que le ha sometido a un plan personal de recuperación que ha dado los frutos esperados.

jon iru, el regreso Gorka ha respondido de manera positiva al proceso de trabajo, duro en las últimas semanas, lo que le ha permitido aparcar momentáneamente los dolores y reincorporarse a la dinámica del Bilbao Athletic, que afronta las ocho jornadas restantes de la liga regular con el objetivo de conseguir plaza de play-off de ascenso a Segunda División.

Una misión a la que se ha sumado desde el domingo Jon Iru, que jugó sus primeros minutos de la temporada nueve meses después de sufrir una grave de lesión, el pasado 15 de julio, en su rodilla izquierda durante el segundo entrenamiento de la pretemporada. El bilbaino completó el último cuarto de hora del derbi ante el Sestao en Las Llanas, cuando sustituyó a Gorka Santamaría y colaboró para que el equipo de Ziganda se llevara la victoria (0-2).