Bilbao - Instalados en una eliminación prematura por cuestión de caer derrotados en sus dos primeros encuentros de la liguilla de semifinales y las victorias de Aimar Olaizola y Andoni Aretxabaleta, Mikel Urrutikoetxea y Mikel Beroiz se tomaban el encuentro de ayer en el Labrit de Iruñea como un partido más para cerrar el duelo. O como un desquite. El desquite del zaratamoztarra, un pelotari de condiciones grandilocuentes, un delantero de colmillo, quizás no tan imaginativo como otros artistas dentro de los cuadros alegres, pero sí con trazas de martillo pilón delante. Urruti lo tiene todo, pero de tanto que tiene aún se arrebata de juventud. Porque, al fin y al cabo, el vizcaino aún es un chaval. Pero con unas manos y un potencial enorme. Ayer lo sufrió Aimar Olaizola en sus carnes, quien no pudo con la velocidad que dio al cuero el espigado delantero. Se lo merendó en dos partes bien diferenciadas: la primera, un monólogo, y la segunda, eliminando la revolución del campeón. El aquí estoy yo. Acabó con la tiranía de Aimar, que es humano aunque lleve un campeonato en el que se empeñe en demostrar lo contrario. En el Labrit lo intentó, apoyado en una pelota que se adaptaba bien a sus circunstancias, poca salida y mucho tiro. y acarició la revuelta tras un 5-17, colocándose 20-19; pero Urruti, que gana poso a cada paso y dio mucha velocidad al remate desde más allá del tercer cuadro, no se achantó. 20-22

Sufrió Olaizola II en el inicio más de lo que se esperaba. Gigante en ataque Urrutikoetxea, el de Goizueta se vio abrumado y sin oportunidades. Algo extraño. No se encontró. Empezó frío el campeón y sin incidencia. Lo notaron en el luminoso, que se explayó azul. Mucho. Hasta un imponente 2-14 que alumbraba una debacle sin parangón en el camino de Aimar y Aretxabaleta. Eso sí, en un encuentro con excedente de tranquilidad, puesto que las miras de la pareja se encuentran depositadas a tres semanas vista. El salpicadero anuncia tormenta el 4 de mayo en Bilbao.

No fue el mejor partido de los colorados y su comienzo anuncia dudas para su siguiente episodio del Parejas. Sin embargo, con el cambio de pelota en el 5-17, Aimar no contuvo el genio. Se soltó la melena. Ahogados en un mar de dudas, el delantero navarro emergió heroico y enchufado con su pelota, mientras que Andoni, con bastante taco, se afanaba en hacer su trabajo y quitarle pelota a Urruti. Cosa que Beroiz no pudo en ese tramo. La tendencia cambió radicalmente e, incluso, se dibujó la voltereta con el 20-19.

Aun así, la presencia del cada día más imponente Urrutikoetxea selló la cita. Un error de Aimar con una cortada -ayer sumó siete fallos, raro en él-, igualó la veintena. Mikel, arrebatado, selló el siguiente para recibir el último aplauso: buscó a Olaizola en el ancho con un remate y después machacó parando al txoko. Una delicia. Acabó el partido Aimar como lo empezó, fallando un remate, y cedió el triunfo. Un triunfo que supuso el desquite de Urrutikoetxea.

Olaizola II-Aretxabaleta 20

Urrutikoetxea-Beroiz 22

Duración: 52:09 minutos de juego.

Saques: 1 de Olaizola II (tanto 16).

Faltas de saque: Ninguna.

Pelotazos: 458 pelotazos a buena.

Tantos en juego: 12 de Olaizola II, 1 de Aretxabaleta, 10 de Urrutikoetxea y 3 de Beroiz.

Errores: 7 de Olaizola II, 2 de Aretxabaleta, 4 de Urrutikoetxea y 2 de Beroiz.

Marcador: 1-2, 2-8, 2-9, 3-14, 4-15, 5-16, 5-17, 6-17, 16-18, 17-19, 20-20 y 20-22.

Apuestas: Se cantaron de salida posturas de XX a XX a favor de Olaizola II-Aretxabaleta.

Botilleros: Al ser las dos parejas de la misma empresa -Asegarce- no hubo botilleros.

Incidencias: Partido correspondiente a la liguilla de semifinales del campeonato de Parejas de la LEP.M disputado en el frontón Labrit de Iruñea. Tres cuartos de entrada.