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Irujo y Olaizola, los protagonistas del verano

Las empresas manistas aprovechan el tirón de sus estrellas para copar la época estival Casi un 10% de los estelares han sido Aimar contra Juan

Irujo y Olaizola, los protagonistas del veranoFoto: Juan Lazkano

Bilbao

ES indudable el tirón en la pelota profesional de Aimar Olaizola y Juan Martínez de Irujo dentro y fuera de la cancha. Son las estrellas rutilantes del panorama manista actual y, por tanto, los más buscados, los más queridos y los más deseados para encontrarse en los frontones. Las empresas lo han palpado de nuevo este verano, otorgando el papel de protagonistas casi absolutos a sus buques insignia en materia de estelares. Entre los dos han copado la mayoría de partidos importantes del curso estival, porque las preferencias de los contratantes a la hora de plasmar su firma en los estelares veraniegos es la de contar con ellos, porque siempre atraen un montón de público. De hecho, su camino se ha cruzado desde el 23 de junio, fecha en la que el delantero de Goizueta se hizo con el cetro del Manomanista ante el potente huracán de Ibero, cuya presencia era de favorito por cómo había aterrizado en la fecha clave del curso pelotazale, en ocho ocasiones, nueve en cuanto empiecen en San Mateo. Así las cosas, durante su carrera como profesionales se han enfrentado en 81 ocasiones, sumando todas las modalidades manistas. De este modo, en las últimas once semanas, menos de tres meses, ha tenido un 10% de los encuentros de toda su carrera deportiva en la élite juntos: poco más diez años desde el debut del manista de Ibero (6/VI/2003). Aumentará su porcentaje con el primer enfrentamiento de San Mateo.

La apuesta de las empresas está clara: dar al público lo que pide si el contratante lo paga. Es decir, ofrecer estelares con Olaizola II o Irujo contra primeros espadas de la empresa en festivales contratados a Aspe o Asegarce; en citas mixtas no es tan exagerado. Olaizola II, además campeón del Manomanista y por lo tanto el pelotari más deseado por los pueblos en el ruedo veraniego, se ha vestido de blanco en 29 ocasiones, incluida la de ayer en Viana, aventajando a su émulo en Aspe en cuatro. Y a la gente le encanta. La incidencia de los dos pelotaris este verano ha alcanzado cotas muy importantes, quizás no por volumen de partidos, ya que, por ejemplo, en el verano de 2012 Martínez de Irujo a estas alturas de la película había jugado un encuentro más, pero sí cuando este número de choques se compara con los otros delanteros de la misma empresa. Titín III, un pelotari que históricamente -cumplió esta semana 21 años como profesional- ha sido uno de los más pródigos en la actividad estival, jugó el año pasado 23 encuentros, todavía por debajo de Irujo, mientras que este solamente ha disputado catorce.

La explicación de la menor implicación de Augusto se explica por la irrupción de nuevos valores en la delantera de la operadora eibarresa, Jon Jaunarena y Joseba Ezkurdia, y la falta de chispa que le está acuciando en los últimos meses. Así, la promotora guipuzcoana ha diversificado la presencia de delanteros en los estelares del verano incluyendo a Yves Xala en las ferias como segundo puntillero del cuadro pero no dotándole de demasiada actividad (once estelares) y sumando duelos a las perlas de Leitza y Arbizu. También es lógica la revolución tranquila dentro de los cuadros alegres de Aspe, puesto que los hasta ahora teóricos cuatro delanteros de primera fila, Irujo, Xala, Titín y Gonzalez, superan ya la treintena y faltaba ese relevo generacional de cara al futuro de la promotora de Eibar, que se ha reforzado con la inclusión de Erik Jaka y tiene en reserva a jóvenes talentosos.

El único que mantiene el pulso de Irujo es Abel Barriola, con 17 partidos, con un 30% menos de partidos que Juan. Huérfano Aspe de una estrella rutilante en lo que a tirón mediático respecta quitando a Irujo, el zaguero de Leitza se ha convertido en uno de los reyes del verano por méritos propios. Tiene tres entorchados veraniegos como Juan y Olaizola II. Después del envite en Altsasu, que ganó el de Ibero con Zabaleta frente a Ezkurdia-Zubieta (22-19), Martínez de Irujo estará sin programar toda esta semana hasta el inicio de San Mateo. Un respiro merecido.

El caso de Aimar es similar, pero con un condicionante: la lesión de Pablo Berasaluze. El delantero de Berriz es uno de los activos más importantes de Asegarce durante la temporada veraniega. Su cotización está siempre al alza por su manera de ver el juego: es valiente, descarnado en el remate, competitivo y muy atractivo para el espectador. Ya dijo Iñigo Salbidea aquel fatídico 28 de abril que "es uno de los pelotaris más importantes para nuestra empresa". De este modo, el actual campeón del Manomanista y Oinatz Bengoetxea han sido básicamente los pelotaris más utilizados por la empresa bilbaina. Aun así, Mikel Urrutikoetxea es actualmente el tercero en discordia dentro de los cuadros alegres de la operadora vizcaina y su despegue le augura un futuro prometedor.

El peso específico de los dos delanteros navarros durante el verano ha sido enorme, siendo los dos más solicitados para los festivales. Los estelares de empresa, salvo excepciones, siempre han contado con ellos. Así, el de Goizueta el delantero estelarista es el más usado dentro del panorama manista. 29 partidos ha disputado, que subirán a la treintena con el encuentro de mañana en Bermeo, y está cubriendo un verano completito.

Quizás en materia de festivales la caja no ha estado tan boyante como en los cursos dorados de la economía, pero es lo normal dada la coyuntura tan complicada que habita en los bolsillos de los ayuntamientos. No obstante, la apuesta está siendo la de ofertar caviar y no buscar experimentos en muchísimos de los casos, incidiendo en la presencia de Juan y Aimar, los más nombrados.

San mateo, el desempate Irujo y Olaizola se han enfrentado en ocho ocasiones en lo que llevamos de verano. En cuatro ha ganado el de Asegarce y en otras cuatro, el de Aspe. Así, la feria de San Mateo, que abren acompañados de Untoria y Cecilio, respectivamente, supondrá el desempate estival, porque están igualados en casi todo. También en títulos.