bilbao. Los peores pronósticos quedaron ayer confirmados. Pablo Berasaluze tiene una rotura completa del tendón de Aquiles de su pierna izquierda, por lo que tendrá que permanecer de baja seis meses, según estiman los médicos del Hospital Quirón de Gasteiz, antes clínica La Esperanza, donde el berriztarra se sometió a una resonancia magnética que no dejó lugar a dudas. "Sentí un pelotazo", relataba el berriztarra, la sensación típica unida al chasquido del tendón. "El pie se queda sin fuerza, sin movilidad", analiza Aritz Altadill, que tuvo esa misma lesión hace cuatro años y se pudo recuperar satisfactoriamente en menos del tiempo previsto. No obstante, los médicos de la empresa valoraron la lesión como fruto de la "mala fortuna". "Es la primera vez que la veo en pelotaris", añadió Iñigo Simón, galeno de Asegarce.
El pelotari acudió ayer a Gasteiz acompañado por su botillero y uno de sus pilares fundamentales, Josetxu Areitio, quien estuvo en todo momento con el berriztarra, y el doctor Simón. El médico de la empresa manista ya confirmó el domingo que previsiblemente la rotura era total, pronóstico que ayer quedó confirmado en la resonancia magnética. "Si la rotura es total, lo previsible será esperar entre seis y nueve meses", analizó Simón. Berasaluze entró en la consulta del prestigioso doctor Mikel Sánchez sobre las 11.30 horas y salió una hora más tarde. A pesar de que los servicios médicos de la operadora bilbaina tenían previsto realizar la resonancia y quizás una ecografía, el mago de Berriz no necesitó la segunda prueba, ya que en la primera quedó patente que la rotura era total y completa. Los peores pronósticos se habían cumplido.
De este modo, hoy Pablo Berasaluze tendrá que afrontar el preoperatorio y entrará al quirófano el jueves o el viernes, porque la fecha aún no está confirmada. Entre los plazos predeterminados, en veinte días los servicios médicos del Hospital Quirón gasteiztarra tienen previsto que el delantero vizcaino podrá empezar la recuperación. "Después de la operación, rondando los quince días y cuando me quiten los puntos, empezaré la rehabilitación, pero para volver al frontón tardaré seis meses", analizó el delantero de Berriz. Para empezar, hará suaves movimientos y ejercicios en piscina.
Tirar para adelante El golpe fue magno para el delantero tanto por la situación, una final del Parejas, como por los malos augurios de una rotura como la que parecía que había sido. Por ello, aunque al principio fuentes del vestuario confirmaron que estaba medianamente tranquilo, "quizás por el shock", después se vino abajo y ayer aún seguía bastante tocado: "Sabía que estaba roto y ya le dije a Iñigo que tenía mucho dolor y así se ha visto". Aunque la historia parece ser larga en el tiempo, aunque seis meses parezcan una eternidad, el manista berriztarra tiene que mirar al futuro. "Hay que mirar para adelante, hay que recuperarse y sé que está difícil jugar otra final, pero lo intentaremos", analizó el delantero.
Confirmados los pronósticos de los seis meses, si todo va por el buen camino, Berasaluze II podrá estar presente en condiciones para el Parejas del próximo año. Aunque si el vizcaino se recupera con más rapidez de la prevista no es descartable la posibilidad de que entre en el Cuatro y Medio. Y es que, la cuenta atrás de seis meses se pone en octubre, más o menos, fecha en la que comienza la jaula. Además, Pablito no entraría hasta la tercera semana de competición -si se mantiene el esquema planteado este curso-, es decir, hasta la tercera semana de octubre, por lo que en caso de que los plazos se acorten, su presencia sí que sería posible en el acotado. No obstante, lo mejor es que queme poco a poco las etapas y vaya recuperando el ánimo para iniciar su vuelta a las canchas con el mayor número de garantías posible.
un golpe para la empresa Tras la final del Parejas, pasase lo que pasase, Pablo Berasaluze ya tenía cerrado un compromiso el viernes en Orduña, donde iba a jugar con el también berriztarra Ibai Zabala. Debido a la lesión, el partido cambiará. "La ilusión era tremenda porque fuera el día de Pablo y desde la empresa lo veíamos con muchas opciones. Pero ha sido un palo. También por cómo ha sido, con una lesión de larga duración", analizó Iñigo Salbidea, gerente de Asegarce, quien apostilló que "necesitará el apoyo de todos, es grave, pero de estas cosas se sale". "A Pablo lo teníamos apalabrado en pueblos porque lo querían a él y empresarialmente tendremos que cambiar los planes, pero lo importante es que se ponga bien", concretó el expelotari. "Cuando lo vimos, nos quedamos helados, porque luego además ha sido algo tan grave...", remachó Salbidea.
El pelotari de Berriz, después del trance, ha recibido muestras de apoyo y cariño de toda la familia pelotazale, de los aficionados y de gente del deporte. De hecho, el rojiblanco Aritz Aduriz, que estuvo presente en el Frontón Bizkaia de Bilbao, afirmó en la rueda de prensa de Lezama que "me gustaría mandarle muchísimos ánimos y que se recupere lo antes posible. Deseo poder verle dentro de poco en otra final".