Lo que parecía que iba a tardar en llegar ya se está convirtiendo en algo habitual. Incluso en algunos certámenes literarios europeos se están recibiendo ya novelas escritas por Inteligencia Artificial (IA).

En la habitual rueda de prensa que precede a la gala de entrega hoy del Premio Planeta, la más dotada económicamente del mundo con un millón de euros, se habló ayer de literatura, pero también de los peligros y de las oportunidades que entraña la IA para el mundo el mundo editorial. El presidente de Grupo Planeta, José Creuheras, la ha situado como un problema para el sector, aunque cree que “no va a sustituir al talento” ni a la capacidad de innovación de los escritores.

“El problema existe, porque hoy los editores no tenemos la capacidad para saber si las obras están escritas o no por el autor, por lo que se deberá legislar, teniendo en cuenta que su incidencia va más allá del mundo editorial”, afirmó Creuheras, quien advirtió de los retos y desafíos que supone la IA para los derechos de autor. El presidente del Grupo Planeta confirmó que la editorial cuenta ya con herramientas digitales para detectar obras ya publicadas entre las presentadas al premio, con el objetivo de que no se cuele La IA.

El director del Área de Libros del grupo, Jesús Badenes, insistió también en que “la inteligencia artificial es una preocupación y un lugar común en todos los congresos de editores”. Para Badenes, “la IA es susceptible de ser analizada desde muchos prismas, entre ellos el punto de vista ético, que corresponde a los reguladores”, pero “será difícil que la creatividad sea sustituida; en cambio será útil en los procesos de documentación o para hacer una distribución editorial más inteligente”.

Buena salud del sector

Los responsables de la editorial explicaron además que estamos viviendo un momento muy dulce para el sector del libro. Dentro del ocio cultural, el sector del libro es el que sale más reforzado de la pandemia, con un crecimiento en el Estado del 19% entre 2019 y 2022, un periodo en el que Grupo Planeta ha crecido un 32%. También destacaron el índice de lectura entre los jóvenes: según datos que manejan en la editorial, el 64% de los jóvenes de entre 15 y 24 años son lectores frecuentes, algo que supone “una buena cantera para el futuro”. En este grupo hay más lectoras, cuya preferencia es la novela romántica urbana. El libro impreso sigue siendo el favorito de los lectores, con un 93% respecto al 7% que representan los formatos digitales, de los cuales un 5% es electrónico y un 2% audiolibro.

Novelas finalistas

En total 10 obras han superado el cribaje final antes de la concesión del galardón, que se celebrará esta noche en el Museu Nacional d’Art de Catalunya (MNAC), en Barcelona, durante el transcurso de la tradicional cena literaria. La 72.ª edición del premio ha sumado un récord de participación: un total de 1.129 obras literarias se han presentado al certamen. De estas, 19 proceden de Bizkaia, una de Gipuzkoa, 1 de Araba y 5 de Nafarroa. El escritor y miembro del jurado, Juan Eslava Galán, explicó que entre las finalistas hay “abundancia” del género de novela negra y testimonial y de personajes femeninos. Según Eslava Galán, “las temáticas presentadas al certamen reflejan el interés de los lectores”. De momento, ningún miembro del jurado se ha decantado por ninguna de ellas como favoritas para galardón literario.

El Jurado del Premio está integrado por José Manuel Blecua, Fernando Delgado, Juan Eslava Galán, Pere Gimferrer, Carmen Posadas, Rosa Regàs y Belén López, secretaria con voto. De entre las finalistas, la mitad se han presentado con pseudónimo, y la otra mitad con el nombre original. Entre las novelas figuran Sexudario, de Mar de Mármara (seudónimo), una novela negra en la que un sintecho y un inspector de policía se aliarán para buscar a un asesino en serie; y Dexados, de Lorenzo Fernández Prieto, un thriller histórico en el que un joven periodista hereda un valioso manuscrito.

El rey del este, de Luis Parterrío (seudónimo) es una novela histórica que muestra las dos caras de Alejandro Magno, mientras que Verlas venir, de Francisco-José Torres Alborch, narra cómo un negociador y solucionador de problemas recién jubilado se verá obligado por personajes del pasado a abandonar su soñado retiro en Oporto. En El reencuentro, de Tintaleve (seudónimo), la protagonista buceará en sus propios recuerdos y descubrirá secretos del pasado celosamente guardados, y en Lágrimas en el fondo del mar, de Clara Isabel Aguilar Esteban, los supervivientes de una embarcación compartirán sus historias y miedos y crearán una hermandad inquebrantable.

Li Qingzhao, de Pilar González España, se trata de la biografía novelada de la poetisa china Li Qingzhao, cuya vida transcurre en el siglo XII y bajo las vicisitudes que provocaron la caída de la dinastía Song, y Otoño sin ti, de Gabriela Monte (seudónimo), es la historia de las mujeres luchadoras de una familia de empresarios gallegos y su imperio conservero.

Finalmente, Otro cielo, de Elizabeth Gothelf, es una historia de crecimiento personal a través de tres generaciones de mujeres de una familia argentina, y Sombras en la pared, de Karla Munich (seudónimo), es la biografía novelada del botánico genetista ruso Nikolái Ivánovich Vavílov. Será esta noche a las 24 horas cuando se conozca al ganador/a y finalista del Premio Planeta.