pASEAR por los puertos pesqueros de Euskadi nunca está de más, especialmente en verano, cuando se dispone de más tiempo libre. Este verano esperan los puertos vizcainos de Santurtzi, Zierbena, Bermeo y Ondarroa, que ofrecen una suculenta ruta gastronómica con sus bares y restaurantes abiertos con propuestas ligadas a la brasa, de las sardinas al bacalao y el marmitako.

El Sabor de los puertos es una de las rutas promocionadas por el Gobierno vasco que tiene en tierras vizcainas su primera etapa. En ella se apoya por el turismo ligado a la buena mesa. Y es que pasear por los puertos de Santurtzi, Zierbena, Bermeo y Ondarroa a la hora de las comidas implica verse invadido por el cálido aroma de las sardinas o los txitxarros cocinados sobre brasas.

Los pescados azules que traen los arrantzales de bajura se suelen preparar al aire libre, en parrillas, y llegan a las mesas de los restaurantes con toda su frescura y sabor, solo levemente acentuado con refritos de aceite, vinagre, ajo y guindilla.

La ruta se puede iniciar en el extremo occidental de la costa vizcaina, en Zierbena. Sus asadores y restaurantes, del Gloria al Eloy y El Muelle, se han convertido en uno de los lugares preferidos por lugareños y visitantes para degustar pescados a la brasa y el mejor marisco.

En el caso de la cercana Santurtzi, los asadores han desaparecido casi por completo de las calles aunque, sin embargo, persisten algunas parrillas donde en verano se pueden saborear las deliciosas sardinas asadas, típicas de la localidad, como en el restaurante Hogar del Pescador de Santurtzi o el Suharri, este último en Itsasalde, cerca del puerto. y En la cocina del Abra no puede faltar el bacalao.

Dejando atrás el Bilbao Metropolitano, la ruta sigue por los puertos que han engrandecido la fama de los pescadores de Bizkaia. Bermeo es un obligado alto en el camino turístico gastronómico. El puerto de pescadores, con sus embarcaciones de vivos colores, ocupa el centro de la villa. Allí, bares y restaurantes se han especializado en la cocina tradicional de productos del mar: de la Kofradia San Pedro Erretegia al restaurante Jokin.

Por lo que respecta a Ondarroa, con su potente flota de pesca de altura, tiene en su haber importantes industrias conserveras, que prolongan el deleite de los productos marinos gracias a las salazones y otras conservas. El sabor marinero de Beikozini y Sutargi Jatetxea resulta incuestionable. Allí se puede pedir un buen marmitako, el guiso costero por excelencia.