Bilbao - Nunca antes el arte y lo audiovosual habían estado tan unidos. Esto lo han hecho posible el Museo Guggenheim y DigiPen Europe Bilbao (universidad americana del videojuego) con sede en Zorrotzaurre, a través del programa TopArte. Una docena de jóvenes entre 15 y 19 años quisieron sumarse a las dos sesiones que se programaron para darle vida a la pinacoteca bilbaina a través de una animación en 2D.

La primera de ellas, que tuvo como eje central la animación tradicional, se celebró ayer bajo el título Animando el Guggenheim donde a media tarde los jóvenes esperaban con entusiasmo plasmar sobre un papel todo lo que les inspiraba el museo.

Allí se encontraban Carlos Valera, profesor y responsable del grado de Bellas Arte de DigiPen y Uxue Artetxe, alumna de la misma facultad. “Es un taller de acercamiento al mundo de la animación y de aproximar a los jóvenes el museo porque parece ser que hay más cosas fuera que les parecen más atractivas”, comentó Valera. El taller fue una especie de introducción al mundo de la animación y en la que el responsable del grado no dudó en incitar a los jóvenes allí presentes a que “por favor” visitasen los museos. Tras sus palabras, salieron al exterior del museo para ponerse manos a la obra y dibujar aquello que más les llamaba la atención. “Hoy les daremos una masterclass de animación. Al final si están aquí es porque eso les gusta y tienen que acercarse a ello”, expuso.

Eso es lo que le sucedió a Artetxe que desde pequeña tenía claro que de mayor quería dedicarse al mundo animado. “Al principio me lo tomé como un hobby pero cuando acabé Bachiller y tuve que decidir lo tuve claro. Esto es lo que quiero y en lo que quiero trabajar cuando acabe la carrera”, dijo Artetxe que cursa tercero de carrera en la facultad de DigiPen.

Hoy será la encargada de impartir esta segunda sesión del taller que tendrá lugar en la sede de DigiPen de 10.00 a 14.00 horas y donde los jóvenes darán vida a los bocetos que realizaron ayer. “Lo que harán será limpiar sus dibujos y en una hora y media de clase aprenderán cómo se crea un personaje de animación. Les explicaremos la importancia del tiempo, les pondremos una medida, cómo varía cada movimiento... Y después proyectaremos unos cortos que han hecho nuestros alumnos y veremos si sus dibujos pueden ser insertados en ellos”, explicó Valera.

A pesar de que sea todavía un campo incipiente, Artetxe opinó que cada vez hay mayores oportunidades de trabajo en el mundo de la animación y de los videojuegos. “Yo estoy encantada. Quiero terminar ya el grado para empezar a trabajar pero a la vez no quiero que termine porque me está gustando mucho”, concluyó la joven.