Bilbao - La propuesta contestaria y regeneradora de Pussy Riot, colectivo artístico ruso que logró notoriedad con su oposición al gobierno de Vladimir Putin, llega mañana a Bilbao, al Kafe Antzokia, de la mano de una de sus integrantes, Maria Alyokhina, con la presentación de su propuesta de teatro-punk Riot days. “No deberíamos esperar a que alguien cambie las cosas, podemos hacerlo nosotros mismos”, explica. New Day, la banda de la ex Dover Amparo Llanos, actuará de telonero.
El montaje Riot days, un show-performance que combina teatro, música y punk, está basado en el libro homónimo de Alyokhina, y supura la rabia y la lucha de Pussy Riot, un colectivo artístico de protesta con sede en Moscú, fundado en 2011, que despuntó por unas actuaciones provocativas de punk-rock en lugares inusuales que acabaron convirtiéndose en vídeos musicales virales en la red.
El feminismo, los derechos LGTB y la firme oposición al presidente ruso Vladimir Putin han sido algunos de los ejes del ideario político de Pussy Riot. El grupo ganó notoriedad mundial cuando, en agosto de 2012, tres miembros del colectivo (Nadezhda Tolokonnikova, Maria Alyokhina y Yekaterina Samutsevich) fueron condenadas a dos años de prisión por “vandalismo motivado por el odio religioso” tras una actuación en una catedral de Moscú para denunciar el apoyo de la Iglesia ortodoxa a Putin.
El juicio y la sentencia generaron una oleada de críticas en Occidente y provocaron la adhesión de organizaciones como Amnistía Internacional. Samutsevich fue puesta en libertad en octubre de 2012 tras una apelación, mientras que Tolokonnikova y Alyokhina fueron amnistiadas por el Parlamento ruso tras 21 meses de prisión. La actuación de esta última en Bilbao, que recalará esta semana también en Madrid, Valencia y Barcelona, está basada en el libro Riot days.
“Es, básicamente, la historia que transcurre desde mi primera acción hasta mi último día de prisión. Pero no son unas memorias, ¡sino un manifiesto! La idea es mostrar a las personas que lo lean que todos tenemos una opción frente a la vida, que cualquiera puede ser una Pussy Riot”, asegura Maria Alyokhina. “No deberíamos esperar a que alguien llegue para cambiar las cosas. Podemos hacerlo nosotros mismos”, apostilla.
Censura y feminismo Ante su visita estatal, Alyokhina se manifiesta a favor de músicos como el rapero mallorquín Valtonyc y critica la censura de los gobiernos. “Le diría que sea fuerte y que no se rinda. La censura y la represión se basan en el miedo a perder el poder de aquellos que las ponen en práctica”, justifica.
Asimismo, Alyokhina también aprovecha para manifestarse feminista y criticar la situación de la mujer en Rusia. En su país, la violencia doméstica ocurre en una de cada cuatro familias. “En Chechenia, las mujeres pueden ser apedreadas hasta morir por llevar minifalda o solicitar el divorcio. Además, el año pasado la violencia doméstica fue excluida del código penal de mi país: si pegas a alguien en la calle, puede denunciarte. Pero si un hombre pega a su pareja, ya no constituye un delito”, denuncia. La activista, que tiene previsto reunirse con representantes feministas vascas y estatales, también reflexiona sobre el avance de la derecha. “En Polonia, además de su conservadurismo, el gobierno dice que no se necesita una judicatura independiente. ¿Te lo puedes creer? La separación de poderes es la base de la civilización occidental. Que la Ley se aplique por igual a todo el mundo. La derecha va a destruir países”, concluye.