madrid - El laureado realizador checo-estadounidense, Milos Forman, que murió el viernes a los 86 años en Estados Unidos donde residía desde los años setenta, alcanzó la fama con dos clásicos galardonados con el Oscar Alguien voló sobre el nido del cuco y Amadeus. Tuvo que abandonar su país natal después de que el régimen comunista acabara con la Primavera de Praga de 1968.
Nacido el 18 de febrero de 1932 en la ciudad de Caslav, actual República Checa, Forman fue huérfano desde temprana edad, tras la muerte de sus padres en el campo de concentración de Auschwitz. Estudió en la Academia de Música y Teatro de Praga y, tras diversas actuaciones escolares y con grupos de aficionados, decidió ser actor profesional e ingresar en el Conservatorio de Arte Dramático, pero fue rechazado y probó suerte en la Escuela de Altos Estudios Cinematográficos, donde se graduó. Simultaneó los cursos con actividades de comentarista radiofónico y guionista de cine (fue ayudante de los guionistas checos Martin Fric e Ivo Novik) y, en 1955, se sintió atraído por la televisión (guionista y ayudante de realización).
Debutó con el largometraje Black Peter (1963), el cual obtuvo el Premio de la Crítica checoslovaca y una buena acogida en los Festivales de Cannes, Nueva York y Locarno (Suiza), certamen que le concedió su Gran Premio.
Además de esta cinta, también realizó Los amores de una rubia (1965) -Gran Premio de la Academia Francesa de Cine y Premio para el Fomento de las Artes y las Ciencias en Venecia- y El baile de los bomberos (1968), que cerró su etapa checoslovaca.
La entrada del Ejército soviético en Checoslovaquia, en 1968, sorprendió a Milos Forman en París, donde estaba en conversaciones con representantes de una importante productora estadounidense, lo que le llevó a exiliarse a EE.UU. hasta que el movimiento pacífico, conocido como la Revolución de Terciopelo (1989-1990), hizo posible en su país la democracia tras la caída del régimen comunista.
hollywood En Hollywood realizó la mayor parte de su obra. Allí se estrenó con Juventud sin esperanza (1971). Luego rodó la película que le dio fama internacional, Alguien voló sobre el nido del cuco (1975), ganadora de cinco Oscar -película, director, actor y actriz principales (Jack Nicholson y Louise Fletcher) y guion adaptado.
Asimismo, logró seis Globos de Oro -película, director, actor y actriz protagonistas, actor debutante (Brad Dourif) y guión- y seis BAFTAS de la Academia de Cine Británica -película, director, actor y actriz principales, actor secundario (Brad Dourif) y montaje.
En 1978 fue nombrado codirector de la Columbia University’s Film División y llevó al cine otro gran éxito taquillero de esa década, la versión del musical Hair.
De los ochenta son títulos como Ragtime (1981); Amadeus (1984), versión de la obra teatral de Peter Shaffer que obtuvo ocho Oscar -película, director, actor protagonista (Fahrid Murray Abraham), entre otros- y cuatro BAFTA.
En 1996 volvió a las pantallas con El escándalo de Larry Flynt, Oso de Oro y Gran Premio del Festival de Berlín, dos Globos de Oro (director y guión adaptado). Le siguieron las cintas, Man on the Moon o El lunático (1999), donde Jim Carrey da vida a un famoso cómico estadounidense.
Un año después colaboró, como actor, en el largometraje de Edward Norton Más que amigos y en 2006 con Los fantasmas de Goya, una crónica de la España del siglo XVIII protagonizada por Javier Bardem y Natalie Portman, Forman declaró que fue “la mejor experiencia profesional” de su carrera.
Su siguiente trabajo, Un paseo bien pagado (2009), es una grabación cinematográfica de la función teatral de la ópera jazz de Jirí Suchý y Jirí Slitr, del mismo título, dirigida por el propio Forman en 2007 para el Teatro Nacional de Praga. - Efe