Paul Urkijo: “Solo queda esperar que el boca a boca funcione”
Lleva siete años esperando a que llegue este viernes... ¿Intranquilo?
-Los nervios los he dejado en el camino. Bueno, o eso creía porque hoy (por ayer) me he puesto nervioso otra vez. La película la haces para que sea vista por el público y ese momento llega ahora. Solo queda esperar que el boca a boca funcione y que la gente vaya al cine.
Si se encontrase hace siete años con un tal Paul Urkijo le diría...
-Que va a ser muy duro, que se agarre fuerte. Ha sido una batalla en todos los niveles. Hacer una película trasciende a lo personal y lo profesional. Creces mucho como persona, eso es así. Le diría también que tenga mucha fe porque la película va a quedar muy chula.
Da igual si han visto a Eneko Sagardoy en el cine, el teatro o donde sea, porque nadie le ha podido contemplar nunca como usted lo ha transformado. ¿Es el demonio con el que soñaba?
-Es mucho mejor. Ha sido un regalo. Eneko ha cogido y de ese demonio clásico e histriónico que yo quería, ha hecho una cosa superbonita y única. Creo que hemos construido, de verdad, un personaje clásico.
¿Y el personaje de Uma Bracaglia?
-Es muy poderoso. A pesar de ser una niña, es capaz de enfrentarse. Casi podría decirse que es más valiente que el resto de los personajes.
Entre medio está ese herrero al que da vida Kandido Uranga, un héroe... ¿extraño?
-Es un antihéroe. Tal vez un anti-héroe muy oscuro. Luego, en el transcurso de la película, descubres la historia que tiene, que le acompaña, que es bastante dura. Tiene su evolución, su clímax, su punto de redención... pero es, ante todo, un personaje muy humano.