eL tiempo parece que va a respetar el fin de semana, lo que sumado a que Orio celebrará sus populosas fiestas de San Nikolas, permitirá disfrutar, más si cabe, de una localidad que se mueve entre el azul del mar y el verde de la montaña, mecida por las canciones de Benito Lertxundi y las percusiones de sus arraunlaris.
Muchos vizcainos y guipuzcoanos, ávidos de fiesta, elegirán Orio estos días ante la llamada de sus fiestas de San Nikolas. El calendario festivo de diciembre suele estar desierto, a lo que se suman las festividades de los días 6 y 8, por lo que la localidad marinera se poblará de visitantes para disfrutar de sus muchos y variados atractivos.
Orio es punto de encuentro del mar, la montaña y la desembocadura del río Oria. Se muestra entre el azul y el verde natural. A pesar de la estación, conviene pasear por sus dos playas, Antilla y Oribarzar, ahora con mucha mayor tranquilidad que en verano. La primera ofrece en sus inmediaciones el camping y un gran parque infantil, mientras que la segunda está cerca del parque natural de Pagoeta, uno de los entornos más espectaculares del herrialde guipuzcoano.
La parte vieja, conocida como Goiko Kale, data del siglo XIII. Su visita puede partir de la iglesia de San Nicolás y ascender hasta las proximidades de la ermita de San Martín de Tours. Las calles del casco histórico ascienden empinadas escalonadas, casi laberínticas, agarrándose a la roca. Blasones, piedra arenisca labrada, balcones de colores vivos y calles empedradas le dan un sabor medieval. El casco histórico de Orio forma parte de un conjunto urbano de gran valor por conservarse casi intacto su trazado medieval, al igual que gran número de casas de diversas épocas.
La brisa marina siempre acompañó a los peregrinos del Camino de Santiago, que cuenta con un centro de interpretación en Orio y muestras arquitectónicas de su legado. Los montes suponen un respiro y se pueden recorrer a través de varias rutas para seguidores del senderismo. El Ayuntamiento incluye un listado con alojamientos, bares y restaurantes .
