Síguenos en redes sociales:

Espejismo de igualdad, también sobre el lienzo

LA ALHÓNDIGA REFLEXIONA ESTE FIN DE SEMANA SOBRE LAS | PERSPECTIVAS FEMINISTAS dentro de LA PRODUCCIón ARTÍSTICA

Espejismo de igualdad, también sobre el lienzoJ.M.M.

ESPEJISMO de la igualdad. Paridad de sexos, pero sólo superficial. En todos los ámbitos, también sobre el lienzo de la producción artística. “A pesar de los brochazos de barniz para embellecer la superficie, no se ha llegado al núcleo duro del problema de falta de reconocimiento profesional a las mujeres”, reflexiona Lourdes Méndez, quien dirige junto al comisario Xabier Arakistain la tercera edición del curso ‘Perspectivas feministas en las producciones artísticas’, que tiene lugar este fin de semana en la Alhóndiga.

La catedrática de Antropología del Arte recupera una vez más ese concepto de espejismo de la igualdad que en su día empleara la filósofa Amelia Valcarcel para explicar que detrás de la aparente paridad entre hombres y mujeres se esconde otra realidad, en la que, como explica Méndez, “se hace una reproducción constante del conocimiento como si en él no hubieran participado ni el pensamiento feminista ni las mujeres”. Una práctica habitual, según sus palabras, a la que se une la permanencia de estructuras sociales muy tradicionales que marcan y abarcan todos los ámbitos de la sociedad, incluido el de las relaciones entre los dos sexos.

En lo que refiere al mundo del arte, Arakistain se muestra tajante y crítico ante la falta de compromiso por parte de las instituciones para la promoción y el reconocimiento de el colectivo femenino de artistas: “Hoy en día carecemos de una política cultural que retenga las recomendaciones presentes en las leyes de igualdad que se han aprobado”. Asimismo, subraya la importancia de modelos como los de Suecia o Reino Unido, donde “se aprecia ese compromiso y se están tomando medidas reales para que las mujeres tengan una mayor presencia dentro del mercado artístico”.

El comisario alude a Sarah Lucas, la artista británica que ha sido seleccionada para representar a su país en la 56 edición del Bienal Internacional de Arte. “Esto es algo que allí ocurre de manera habitual porque realmente existe una preocupación por la desigualdad de sexos que se sostiene en el tiempo”, explica Arakistain, algo con lo que coincide Méndez, al tiempo que destaca la “involución” que, a su juicio, ha sufrido la lucha feminista en los últimos 40 años. “Parece que últimamente ha habido un parón, es decir, que se nos ha dejado llegar hasta un punto en el que ahora nos impiden seguir avanzando”.

Ese estancamiento en la lucha por los derechos de la mujer y la igualdad de oportunidades trae consigo, centrándose en el ámbito artístico, “una falta de reconocimiento y escasa presencia de mujeres en las exposiciones de los museos, algo que a día de hoy es absolutamente tremendo”.

MAYORÍA MINORITARIA En ese aspecto, ambos destacan la implicación de la Alhóndiga en la búsqueda de la igualdad de sexos en su programación de actividades y exposiciones, y consideran que actualmente es el único centro en Euskadi con una apuesta en la materia. El edificio bilbaino acoge por tercer año consecutivo este curso académico en el que una selección de ponentes de diferentes generaciones, disciplinas y nacionalidades reflexionan sobre las problemáticas a las que se enfrentan las investigadoras feministas para seguir construyendo un conocimiento no sexista.

En la presente edición cuentan con la participación de la catedrática de Filosofía Política María Xosé Agra y la artista internacional Kajsa Dahlberg, que abrieron la programación en la tarde de ayer. Hoy será el turno de la chilena Soledad Novoa, Margaret Harrison, Marie-Josèphe Bonnet y la historiadora vasca Haizea Barcenilla. La leyenda de la actividad feminista estadounidense Carol Duncan será la encargada de poner el broche final a esta iniciativa a la que se han inscrito unas 300 personas, en su mayoría mujeres. “Sorprendentemente, nosotras constituimos una mayoría en el sector cultural y artístico, pero seguimos siendo minoría en lo que se refiere al prestigio y reconocimiento público”, sentencia Méndez.

Esta sinergia interdisciplinar que se alargará hasta mañana busca despertar la reflexión crítica del público, algo que cada vez se antoja más difícil en una sociedad donde prevalece el sujeto entretenido y sin capacidad crítica frente al sujeto cultivado, afirma Arakistain, quien destaca que es imprescindible contar con una población formada para llevar a cabo una transformación social de este tipo, la revolución que garantice unos derechos que “pensamos que están adquiridos, pero que todavía son frágiles”, indica.

Más allá de ese espejismo de igualdad que todavía vislumbran y preocupados por tener la oportunidad de dar pasos adelante en un largo camino por recorrer, ambos recuerdan que “lo más importante es que como sociedad no podemos permitirnos prescindir de esta manera de la mitad del talento humano”.