ni un ápice de nerviosismo se vislumbra en el flow del que ya es el rapero con más capacidad de improvisación. “Nunca me he quedado en blanco, eso es algo de principiantes”, asegura Endika Gutiérrez (Barakaldo, 1984), aka -también conocido como- Invert, ganador frente a 131 contrincantes de todo el Estado en la Red Bull Batalla de los Gallos 2014 celebrada en Cádiz. Maestro de ceremonias diestro en rimar palabras y sílabas que crean ritmos, la victoria le llega después de haber alcanzado la final del asalto que elige al mejor gallo estatal durante tres años -2008, 2009 y 2013.

“Siempre he tenido facilidad para expresarme, era el típico payaso de mi grupo”, relata Invert, quien se desliga de la imagen contestataria y rebelde que a menudo se expone de los raperos. Comenzó adentrándose en el mundo de la cultura hip hop de la mano del breakdance, baile que ha practicado hasta que una lesión en la rodilla se lo ha impedido. A los quince años llegó el rap: primero comenzó a escribir y después se adentró en la improvisación.

Como ocurre con el desarrollo de las aficiones minoritarias que no cuentan con un gran número de adeptos, los comienzos de Endika Gutiérrez no fueron fáciles. “En el colegio te pones pantalón ancho y se ríe de ti todo el mundo. La gente es bastante mala, pero yo he sido constante”, explica el rapero barakaldarra. A pesar de los censores escolares, Invert se alegra de haber contado con el apoyo de sus amigos desde el principio; es más, fueron ellos quienes le animaron a presentarse por primera vez a la Batalla de Gallos, allá por el año 2007. Desde entonces, se ha hecho su hueco en el arte de la declamación callejera, donde sigue siendo juzgado, pero de una forma más constructiva frente a un público que conoce las complejidades que conlleva rapear al instante.

“Lo más arduo de la improvisación es la puesta en escena, que se note que estás componiendo al momento y ganarte al público. Puede improvisar cualquiera, pero lo difícil de ello es decir cosas dentro del contexto, utilizando frases con sentido y juegos de palabras que provoquen saltar a la gente”, apunta Invert. En ese sentido, el barakaldarra opina que la autoridad del público en el jurado es mínima, “como de un 5%””. Sin embargo, donde realmente influye es en el participante, quien se viene arriba amparado en la ovación. ¿Y si los juicios son negativos? “Las críticas, sean para bien o para mal, significan que se habla de ti y eso es porque estás haciendo algo bien”.

a por todas La Batalla de los Gallos no es una competición, sino una batalla, como el nombre indica. “Es un uno contra uno en el que hay que sacar los defectos físicos del contrincante para intentar humillarlo”. ¿Eso significa que mientras más agraciado seas más ventajas tienes para ganar? “Exacto”, aclara Gutiérrez, como quien emula los piques que los poetas del Siglo de Oro evidenciaban en sus sonetos. Más allá de la contienda propia del corral, el rap, gran exponente de la cultura callejera -incluso de un estilo de vida-, tiene un importante componente de crítica social. “Cada uno habla de la sociedad de la forma en la percibe su realidad”, señala.

La realidad del invicto vizcaino advierte de que a pesar de la destreza mostrada en la refriega, no puede vivir del rapeo debido a una industria prácticamente inexistente dentro de su sector. Diplomado en Magisterio deportivo, el barakaldarra trabaja en un gimnasio mientras dedica su tiempo libre a componer rimas en un estudio improvisado en su casa. Aunque es consciente de que puede haber gente mejor que haya decidido no presentarse porque no le gusta el formato, la victoria en la Batalla de los Gallos puede brindarle una oportunidad irrepetible para desarrollar una carrera en el mundo del rap; e Invert está dispuesto a ir a por todas.

El próximo combate a esgrimir será en noviembre, contra los contrincantes latinoamericanos de la versión internacional de la Red Bull Batalla de los Gallos que se celebrará en alguna ciudad del Estado aún sin determinar: “Puede que no gane, pero veo más fácil ganar la internacional que la nacional, teniendo en cuenta que jugaremos en casa, en nuestro contexto lingüístico y rodeados de nuestro público”, decreta el rapero.