nueva york. Los mensajes que llegaron a cuestionar el Guggenheim realizados durante el Gobierno López habían causado preocupación entre los responsables de la Fundación neoyorquina. El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha admitido que uno de los objetivos que tuvo la reunión que mantuvieron el pasado viernes el diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao, y él mismo en Nueva York, durante su visita oficial en Estados Unidos, fue la "de tranquilizar" y aclarar "que estamos dispuestos a hablar" de la negociación de la prórroga del contrato, que expira en diciembre de 2014. También pretendieron transmitir la existencia de un clima, "por parte de las instituciones participantes" en el proyecto Guggenheim Bilbao "favorable a esa relación".

"Es verdad que ha habido un tiempo de preocupación en la Fundación sobre cosas que se habían dicho en el pasado, que, conseguido lo que se había conseguido, era posible incluso despreciar la marca Guggenheim", dijo. Urkullu explicó que existían "inquietudes" de la Fundación respecto al acuerdo que vincula los Museos de Nueva York y Bilbao, surgidas por cuestiones como la creación de una ponencia parlamentaria para analizar la necesidad o no de la renovación del convenio, o el cuestionamiento de su director, Juan Ignacio Vidarte. En declaraciones a Europa Press, el lehendakari lamentó el sentimiento localista -lo que él calificó de territorialitis- por el que se "desprecia" la marca Guggenheim, cuando, pese a que el museo está ubicado en Bilbao, es "polo de atracción" económica, turística y cultural para toda Euskadi. "Esto nos preocupaba y hemos querido que haya un clima suficiente y más que suficiente de confianza, subrayando que hay capacidad de crecimiento", aseguró.

Las instituciones vascas se reafirmaron en Nueva York en el apoyo "al proyecto de presente y futuro del Guggenheim Bilbao" y trasladaron "el deseo firme de apoyar y prorrogar, de mutuo acuerdo y a largo plazo (diez años y prorrogables), el convenio que une a las instituciones vascas y a la Fundación Solomon R. Guggenheim" y "que ha dado resultados excelentes".

Urkullu avanzó que todavía no se ha iniciado la negociación de las cláusulas del contrato de gestión firmado hace 20 años, pero su pretensión es llevar el proceso "de forma compartida, en colaboración y cooperación" con la Fundación norteamericana. Tras la reunión el lehendakari apuntó a que el acuerdo deberá "readecuarse" a los tiempos actuales, ya que el anterior fue rubricado en 1991, antes de conocer el funcionamiento y el impacto de su puesta en marcha.

La fundación neoyorquina también considera a día de hoy al museo bilbaino un proyecto "estratégico en Europa". Su director, Richard Armstrong, mostró el interés por renovar con Bilbao y destacó el "enorme valor" de la pinacoteca bilbaina, asegurando que la colaboración con el Museo Guggenheim Bilbao "ha sido un éxito sin precedentes".