En la historia reciente de las marchas antiglobalización, el Foro Social de Génova (2001) tiene un lugar destacado. Díaz: No limpiéis esta sangre refleja la brutalidad policial y las acciones policiales que años después permanecen inquietamente no juzgados. Como muestra y mosaico de ese mundo, no indaga tanto en los ideales y la lucha de los jóvenes de medio mundo (se escuchan muchos idiomas y acentos) miembros de un movimiento que se presenta pacífico, organizado y con una buena logística. Producción de varios países, intensifica la acción en la violencia de la policía y su falta de escrúpulos. Cuando el hilo conductor parece que va a ser un periodista que decide marcharse a Génova o una madre que busca a su hija, se desvanece. Entre la personalización y la impersonalización, elige una visión más colectiva y casi documental. Díaz, esa escuela donde se debate y se conecta al cibermundo gracias a Indymedia, no hay debate de ideas sino la manifestación cruda de los porrazos. Claramente no neutra ante las injusticias, las reflexiones son claras. Estamos ante una película que aborda el problema de la brutalidad como orden capitalista.
Dirección: Daniele Vicari. Reparto: Claudio Santamaria, Jennifer Ulrich, Elio Germano, Davide Iacopini, Ralph Amoussou, Fabrizio Rongione. No recomendada a menores de 12 años.