bilbao. A la cuarta la vencida. Kiko de la Rica ha conseguido alzar su primer Goya con Blancanieves, tras cuatro nominaciones como mejor director de fotografía en los premios de la Academia del Cine. "Estoy un poco abrumado por todas las felicitaciones recibidas", confiesa el bilbaino en declaraciones a DEIA. "Es increíble el poder mediático de los Goya, es una especie de espectáculo", señala. A pesar de la alegría por el galardón recibido -principalmente por la ilusión que ha supuesto para su familia y amigos-, de la Rica no concede demasiado valor a los Goya. Según el director de fotografía, son como "la lotería", ya que "el sistema de votos no es justo". En ese sentido, apunta que el premio a la mejor dirección de fotografía recibido recientemente por el Círculo de Escritores Cinematográficos tiene más valor para él.

Sea como sea, el bilbaino asegura que el Goya conseguido es la suma del trabajo de sus compañeros; ya que el montaje, la dirección de arte, el vestuario... han influido mucho en el dominio visual y estético del filme. "Una película muda es difícil de digerir si el peso no lo lleva la imagen y la música", declara de la Rica. Asimismo, recalca el estilo por el que se ha caracterizado el largometraje: "La fotografía pone el acento a ese lenguaje cinematográfico que ha elegido Berger, que hemos entendido todos y hemos estado a favor de él". De hecho, de la Rica asegura tener previsto volver a trabajar con Berger en un futuro, aunque señala, en clave de humor, que "él irá muy despacio y yo continuaré a mi ritmo".

sorprender El bilbaino no recuerda ninguna categoría en la que el galardón le haya sorprendido. Se muestra conforme con lo logrado por Blancanieves en los Goya. "Yo creo que se han repartido bien", señala. En cuanto a su principal contrincante, Lo imposible, de la Rica comenta que es poderosa por lo bien que está ejecutada. Sin embargo, indica que en comparación con la película de Berger "son muy distintas a nivel fotográfico". Y, a veces, "lo que sorprende es lo que gana", puntualiza.

Sobre la forma en la que pueda afectar los diez galardones de Blancanieves a la presencia del filme en taquilla, el director de fotografía estima que el incremento de público no será impresionante: "No creo que a la gran masa le pueda gustar demasiado una película muda en blanco y negro", comenta. No obstante, señala que el factor sorpresa funciona, y hay mucha gente a la que la película termina atrapando.

Presentada internacionalmente en Toronto, Blancanieves es un filme que "ya se está moviendo y funcionando bien en muchos países". No solo eso, sino que afirma que se trata de algo "increíble" que una película "con tan poco presupuesto finalmente vaya a dar dinero y vaya a lograr tanto público".

reivindicar El discurso del bilbaino fue especialmente escueto. "Yo creo que el premio estaba más que dedicado", señala de la Rica, quien opina que las dedicatorias se repiten demasiado en este tipo de eventos. Por ese motivo, considera que la ceremonia es "tediosa y larga; le sobran 40 minutos".

En cuanto a la carga política de la gala, el director de fotografía de Blancanieves afirma que "hubo suficiente", ya que tanto el presidente de la Academia de Cine, González Macho, como la presentadora Eva Hache o algunos galardonados pusieron su granito de arena. Y aunque opina que "no es la plataforma para hacer reivindicaciones", a él también le hubiera gustado decir algo. "No soy un buen orador", confiesa de la Rica, a quien le cuesta hablar delante del público y, por ello, se retiró muy rápido tras una breve agradecimiento a su familia.

"El cine español no se consume, hay que hacer películas de género y crear industria", habría dicho de la Rica; quien, como Candela Peña, reivindica trabajo para que la industria cinematográfica no se hunda.