Garabat se despide del público entre amigos

Bilbao. La Galería Garabat, sita en la calle Dos de Mayo, en la zona de Bilbao La Vieja, abrió ayer sus puertas al público, pero por última vez. Creada hace cinco años por Borja Buján, el local pretendió formar parte de lo que el Ayuntamiento de la villa anunció como un distrito artístico lo que, con el paso de los años, "no se ha hecho realidad", en palabras del artista y emprendedor.

A pesar de que el cierre pone de manifiesto la dificultad de llevar a cabo proyectos de este tipo en esta zona, una de las más necesitadas de la ciudad, Buján anima y alienta a posibles futuros inquilinos del local. A pesar de conocer los malos tragos de quien pretende poner en marcha un proyecto así cree que "lo que la zona necesita es que a la par que algunos nos vamos otros nuevos vengan, y que el movimiento no cese". Buján se queja de que "todo lo que se ha propuesto para dar vida a esta zona ha sido iniciativa propia de quienes estamos ahí", dejando patente que el Consistorio no ha tenido la participación que requieren revitalizaciones como las que se han propuestos para Bilbao La Vieja.

No obstante, más allá de problemática, el cierre del local dejó patente que muchos bilbainos y bilbainas han agradecido la presencia de Garabat en la villa. Alrededor de 120 personas se acercaron entre las 19.00 y las 23.00 horas del viernes a la "exposición sorpresa" que organizaron 21 artistas. "Hemos intentado plasmar lo que nos transmite el nombre de Garabat, lo que nos viene a la cabeza al pensar en el nombre y en el sitio", explicó ayer Karra, uno de los participantes.

Tras la muestra y la pequeña fiesta que organizaron en el local, los asistentes y los organizadores continuaron las celebraciones por los bares de la zona. Ayer al mediodía Garabat bajó la persiana definitivamente.