Ford Focus Econetic
Ford reestrena la variante ECOnetic del Focus, revalorizada tras el injerto del sistema de desconexión automática del motor en las paradas. Gracias a él contamina menos al recortar el gasto en 0,7 litros a los cien, lo que compensa el desembolso extra de 900 euros.
LAS reinterpretaciones verdes de automóviles convencionales tienen futuro. Sus probabilidades de éxito estriban en la sintonía entre ecología y economía que alcanzan. Conscientes de que la mejor ruta hacia el respeto por el medio ambiente discurre a través del bolsillo, los fabricantes se han lanzado a desarrollar este tipo de versiones limpias. Ford, en concreto, pone en activo una lectura optimizada del Focus ECOnetic, que contamina y consume menos que la vigente hasta ahora.
La toma de conciencia ecológica es más factible si, de paso, llena la hucha. Ahí radica el principal aliciente de esta variante del compacto de Ford, que también cuenta con alternativas ECOnetic en las gamas Fiesta, Mondeo y Transit. En esta segunda remesa, el Focus esgrime unas credenciales impecables. Mantiene las cualidades dinámicas que procura el propulsor TDCi 1.6 de 109 caballos, pero contiene de manera significativa el gasto de combustible y, como consecuencia, las emisiones de dióxido de carbono.
La reducción en el consumo se cifra en 0,7 litros cada cien kilómetros, con lo que el promedio oficial logra establecer una atractiva marca: 3,8 litros. De rebote, los niveles de CO2 descienden hasta el no menos llamativo nivel de 99 gramos por kilómetro. Lo consigue fundamentalmente gracias a la aportación del sistema Auto-Start-Stop, instalado por primera vez a bordo de un modelo Ford. Este dispositivo desconecta de forma automática el motor cuando el vehículo se detiene (en un atasco, en un semáforo, en una parada prolongada…) y vuelve a activarlo en el momento en que se pisa el embrague para engranar la primera.
Al ahorro de combustible y emisiones contribuyen también algunos retoques técnicos (desarrollos de cambio ligeramente más largos y diversos ajustes eléctricos) y aerodinámicos. Además, el modelo instala un ordenador de viaje con vocación didáctica, que supervisa el estilo de conducción para fomentar el ahorro: sugiere el momento adecuado para subir de marcha y "recompensa" con florecitas la eficiencia energética del piloto.
El manejo de este coche no entraña dificultad alguna. A las sensaciones provocadas por el start/stop se acostumbra cualquier conductor en pocos minutos; no obstante, dicha función se puede desactivar por medio de un botón situado en el salpicadero. Habituarse a las relaciones de cambio largas requiere un cierto sosiego al volante, talante que se presume en todo comprador de esta versión; quienes buscan prestaciones suelen optar por otras más vehementes.
La fisonomía y la puesta en escena apenas difieren de las mostradas por los demás Focus. Sólo un ojo clínico es capaz de detectar la leve rebaja en la distancia al suelo o la presencia de una parrilla frontal parcialmente obstruida; el ECOnetic conserva el alerón de la zaga y monta neumáticos de baja resistencia sobre llantas de acero provistas de tapacubos para reducir la fricción del aire.
Esta versión se comercializa únicamente con carrocería de cinco puertas y acabado Trend. Sus dotaciones son idénticas: seis airbags, control de estabilidad y tracción, ABS, aire acondicionado, elevalunas delanteros y retrovisores eléctricos, radio CD con mandos en el volante, etc. Cuesta 19.320 euros, unos novecientos más que un Focus convencional equivalente. La austeridad en el gasto propicia amortizar esa diferencia antes de recorrer los primeros dos mil kilómetros.
NUEVO ACABADO SOUND La gama Focus amplía su oferta con la terminación Sound, una puesta en escena dirigida a usuarios que buscan un equipamiento completo a precio tentador. Toma como punto de partida la versión Trend, a la que completa con nuevas dotaciones: climatizador bizona, volante de cuero y control de crucero, además del paquete Sony Mp3 con manos libres Bluetooth V2C y conector auxiliar USB.
Ofrece tres ajustes de imagen diferentes. El primero propone llantas de aleación de 16 pulgadas, consola central y asientos deportivos; los Sport dan a elegir llantas de aleación de 17" o 18" y añaden suspensión deportiva y alerón largo en el mismo tono de la carrocería.
El apartado de opcionales contiene elementos como el sensor de aparcamiento trasero, anclajes ISOFIX, barras de techo con acabado en aluminio y cristales de privacidad con cortinillas. Existe una versión superior, denominada Titanium Sound, que mejora su equipamiento incluyendo el paquete Visibilidad (autoencendido de faros, sensor de lluvia y espejo autocrómico), llantas de 16", consola central, control de velocidad, climatizador doble, elevalunas eléctricos delante y detrás, además de arranque por botón Ford Power.
El capítulo de novedades en la gama Focus culmina con las versiones especiales Latvala e Hirvonen. Los dos pilotos nórdicos, que defienden los colores de Ford en el mundial de rallys, apadrinan series destinadas a los clientes que reclaman un coche con ademanes deportivos o estética más dinámica. Ambas se ofrecen en carrocería Coupé, con mecánicas 1.6 Ti-VCT y 1.8 TDCi de 115 CV en el Latvala y con propulsores 2.0 Duratec y 2.0 TDCi de 145 y 136 CV respectivamente en el Hirvonen.