Barcelona. Los padres de Arantxa Sánchez Vicario afirman que están siendo tratados "injustamente" por su hija tras la publicación de su libro y la interposición de varias demandas y querellas, y se sienten "calumniados", aunque, pese a todo, desean "recomponer una situación familiar difícil y dolorosa". En un comunicado redactado por la madre y firmado también por su esposo, le piden perdón por si en algún momento no se ha sentido "apoyada o comprendida" y dejan en sus manos "la voluntad de perpetuar" esta situación de enfrentamiento. Los padres de la excampeona olímpica rompieron ayer el silencio que mantenían. "Para no perjudicar ni entorpecer cualquier posibilidad (por remota que ésta fuere) de recuperar la paz familiar, que es, y ha sido siempre, nuestro objetivo y más preciado deseo", dice la nota. Entre otras disputas, Arantxa Sánchez denunció a sus padres para que dejen de usar el piso que les cedió para vivir en la avenida Diagonal de Barcelona.