PAMPLONA. La ceremonia, informa la web Vanitatis.com, se celebró enmarcada en un halo de misterio, ya que las últimas informaciones apuntaban a que sería en julio, cuando pasarían por el altarconcretamente un día 7, San Fermín. Solo la familia del novio estuvo presente en la boda. Ni su hermana, la princesa de Asturias, ni sus padres, Jesús Ortiz y Paloma Rocasolano, formaron parte de los invitados de este enlace.
El viernes por la noche, Telma y Jaime fueron agasajados por los del Burgo con una suculenta cena en un reservado del restaurante Castillo de Gorraiz, a las afueras de Pamplona.
La llegada de la novia
Telma Ortiz y su hija Amanda llegaron a Pamplona sobre la hora de comer del viernes en avión. Su futuro marido le esperaba con los brazos abiertos en el aeropuerto de Noáin.
Sin embargo, Jaime no era el único que esperaba ansioso la llegada de Telma. Los padres, Jaime Ignacio y Blanca Azpiroz, así como la mayoría de sus familiares también estaban expectantes por ver a la futura novia.
Aunque en su suegra, según se ha apuntado, no despertaba a priori tantas simpatías, algunas fuentes ya apuntan a que “ya se ha hecho a la idea y se esfuerza para que todo salga bien. Quiere la felicidad de su hijo”.
Carta abierta en ‘El Mundo’
Jaime del Burgo, el ya marido de la hermana de la princesa de Asturias, ha escrito para la edición de este domingo de El Mundo una carta abierta a favor del derecho a la intimidad de su recién esposa. “Telma Ortiz ha hecho lo imposible en defensa de su derecho al honor, a la intimidad y a su propia imagen”, asegura el empresario. “Ha librado su particular batalla contra la podredumbre mediática que se ha ido extendiendo en la España cainita”.
Además, en el texto escrito por Del Burgo, señala que, por el acoso sufrido todos estos años, Telma Ortiz y él se irán a vivir fuera de España, concretamente a Londres, donde él trabaja desde hace varios años. “Ojalá hayamos puesto un punto y final haciendo suya mi residencia en el extranjero”, destaca el empresario y político.
Esta decisión explicaría por qué Telma Ortiz abandonó su puesto hace unas semanas en el Ayuntamiento de Barcelona, donde trabajaba como subdirectora de Relaciones Internacionales desde 2009. Ahora todo apunta a que emprenderá una nueva vida.