TENGO dos formas de saber que las navidades ya están cerca. La primera es porque ya tenemos el turrón en los supermercados y la segunda porque me llegan mil preguntas sobre qué teléfono regalar en Navidad. No voy a hablar de marcas o de modelos específicos, pero si voy a dar unos cuantos consejos para que puedas acertar. Recuerda que antes viene el Black Friday y si sabes qué modelo es el que quieres para esa fecha, tendrás el precio y podrás saber si realmente tiene descuento, no esperes a ese día para creer el cartel que pone 50% off. Recuerda que cuanto más caro es un móvil no tiene por qué ser mejor, que hay marcas de China que funcionan a la perfección y que los modelos que hay ahora mismo en el mercado, excepto el de Google que sale en breve, cambiarán en unos meses.
Lo primero que tenemos que hacer es aclarar que los móviles tienen dos tipos de memorias. La RAM que es la que se utiliza junto con el procesador para hacer que funcionen las apps y la ROM que es la que las almacena. El mínimo para RAM es de 4 GB, pero ya estamos encontrando algunos modelos de gama media de 6 GB. En cuanto al almacenamiento, vas a acabar utilizando todo el espacio que tengas. En la actualidad el mínimo es 64 GB, pero si no utilizas la nube para guardar las fotos, tienes que pensar en un teléfono de 128 GB. Esto no tiene que ver con usar una tarjeta de almacenamiento externo, ya que estas no sirven para almacenar aplicaciones, solo para fotos, vídeos, documentos?, Podemos complicar más la cosa, hablando del procesador, pero salvo que uses el móvil con videojuegos potentes (Fortnite) la mayoría de los dispositivos ajustan a la perfección el motor interno.
La estrategia de los fabricantes para este año es el de vender los móviles por sus cámaras fotográficas. De dos, tres o cuatro lentes, que permiten hacer fotos en condiciones extremas o con un software que gracias a la inteligencia artificial es capaz de eliminar en el momento del disparo hasta la más mínima arruguita de la comisura de los labios. Pero casi nunca nos damos cuenta que nos pasamos el día haciendo selfies, por lo que algunos fabricantes están incorporando la doble cámara frontal, mucho más útil para este tipo de retratos. Este tipo de objetivos consiguen a la perfección el efecto bokeh que desenfoca ligeramente el fondo, dando una profesionalidad a nuestros retratos. Lo que sí te aconsejo es que el software de la cámara incorpore el modo AI (Inteligencia Artificial). Los efectos que hace, la mejora de la calidad de los paisajes y el tan aclamado “umbral de belleza” dan una nueva dimensión a nuestras fotografías.
Las baterías siguen siendo la asignatura pendiente de los smartphone. Fíjate en que al menos sean de 3.800 o 4.000 mAh, aunque la mayor capacidad suele implicar un mayor peso. Yo tengo un móvil que gasta bastante batería pero para compensarlo es capaz de recargarse por completo en unos 20 minutos y además de forma inalámbrica. Y lo último, pero para mi fundamental en la actualidad, que incorporen algún sistema de seguridad biométrico, como el acceso al teléfono mediante huella o reconocimiento facial. La mayoría de los bancos incorporan esta medida para entrar en su aplicación y cada día lo veremos más veces como en las tiendas o comercios electrónicos. Sistema operativo, 4G o 5G, tipo de pantalla o cuál es el precio de una reparación son otros factores a tener en cuenta, pero no nos cabe más. Si tu móvil tiene más de cuatro años, te aseguro que vas a disfrutar de verdad con uno nuevo.
@juandelaherran