Adentrarse en la fundación y el legado de Industrial Light & Magic, la compañía de efectos especiales fundada por George Lucas en 1975 que fue vital en la producción de un título ya mítico de la historia del cine como es La guerra de las galaxias, allá por el año 1977, es sin duda, una grandísima aventura. Disney y Lucasfilm se dieron la mano para servir este viaje en bandeja a todos los amantes no sólo del universo Star Wars sino de otros muchos títulos que han salido de esta factoría con la docuserie de seis capítulos Light & Magic que hoy miércoles estrena Disney+.

En Light & Magic, gracias al trabajo del director nominado al Oscar Lawrence Kasdan, los espectadores podrán conocer lo que sucede de puertas para adentro de Industrial Light & Magic, la división de producción virtual, animación y efectos visuales especiales de Lucasfilm. Desde Disney+ se destaca que “los espectadores van a poder averiguar qué inspiró a algunos de los realizadores más legendarios de la historia de Hollywood en las últimas décadas y conocer sus trayectorias, desde sus primeras películas personales hasta cómo lograron dar vida a la visión de George Lucas”. Todo esto, además, de la mano de Imagine Documentaries y Lucasfilm, y con Brian Grazer y Ron Howard como productores ejecutivos y con entrevistas exclusivas con el propio George Lucas, Steven Spielberg o Robert Zemeckis.

El nacimiento de Industrial Light & Magic se produjo en un momento en el que la industria del cine necesitaba dar un importante salto. Una generación de nuevos creadores, entre los que se encontraba el propio George Lucas, tenían multitud de ideas para dar forma a nuevos y distintos proyectos pero faltaba la infraestructura, fundamentalmente en el mundo de los efectos especiales.

FÁBRICA DE SUEÑOS

Y en esta coyuntura, apoyado en su asistente John Dykstra y rodeándose de un equipo de lo más diverso en el que había desde creativos hasta artistas pasando por ingenieros, se dio forma a un proyecto que, iniciado en un almacén de California, revolucionó la industria del cine. Comenzando por La guerra de las galaxias y todas las cintas posteriores de su universo, pero pasando también por otras producciones verdaderamente impactantes en este campo. En la lista se podría incluir toda la saga de Indiana Jones, Parque Jurásico, las andanzas de Marty McFly y Doc en Regreso al futuro, los alucinantes efectos de Terminator 2, o incluso, más recientemente, el universo Harry Potter.

En 2017, cuando Industrial Light & Magic cumplió 40, su creador declaraba que “siempre hubo un momento en el que cada vez que alguien se acercaba a nosotros decía: “Esto es imposible, no podemos hacerlo”. Y entonces yo decía: “Ese es mi trabajo, hacer posible lo imposible”. Mientras que Steven Spielberg, apuntando alto, insistía en que “siempre he pensado que si ILM hubiera dirigido la agencia espacial ya habríamos colonizado Marte”.

Durante esas cuatro primeras décadas, cumplidas tres años después de que Lucasfilm (y con ella Industrial Light & Magic) fuera vendida a Disney por la friolera de 4.000 millones de dólares, había participado en más de 300 películas y había conseguido 16 Oscars de la Academia de Hollywood a los mejores efectos especiales de una treintena de nominaciones, además de más de una decena de premios Bafta.