Ni mucho ni poco, simplemente 14 segundos

Ordizia - Las distancias, tanto las físicas como las temporales, siempre son relativas y muchas veces el sentirse cerca o lejos depende de cómo se mire el asunto. El trecho a analizar en la primera jornada de la Vuelta al País Vasco lo marcan 14 segundos, los que Alberto Contador le metió a Alejandro Valverde tras su demoledor -e inesperado para el murciano, tal y como reconoció en meta- ataque en la segunda y decisiva ascensión a Gaintza. ¿Muchos o pocos? ¿Insalvables en las cinco jornadas restantes o remontables a tenor del terreno que queda por cubrir? "Es mucho, pero poco", aseguraba, críptico, tras cruzar la pancarta de llegada Beñat Intxausti, el vizcaino que ejerció de punta de lanza para que Valverde lanzara el ataque que le dejó con la única compañía de Contador en cabeza de carrera. Mucho, porque la fortaleza mostrada por el de Pinto para alejar de su rueda al murciano fue abrumadora, pleno de fuerza y potencia; poco, porque quedan kilómetros y desniveles para darle la vuelta a la situación y porque el del Movistar también mostró fortaleza y ambición.

Opinión parecida comparten los protagonistas en cuestión. "Esto no está decidido, ni mucho menos", avanzó Contador, tan satisfecho por la victoria como cauto ante el trabajo que todavía le queda por completar para anotarse la victoria final. "El resultado es muy bueno pero la Vuelta está totalmente abierta. Valverde ha ido fortísimo", sintetizaba el corredor del Tinkoff-Saxo, quien reconoció que estos días anteriores había entrenado muy fuerte, "porque el primero suele ser mi peor día, el que más me cuesta. Tenía dudas sobre cómo iba a responder en el repecho final pero las sensaciones han sido muy positivas".

"No me lo esperaba" En el rincón contrario del cuadrilátero, el vaso se ve medio lleno aunque el palo fue de los que duelen por inesperado. "Yo tenía que probar, he arrancado y ha habido un momento en el que parecía que Alberto iba jodido. Había mucho viento de cara y me ha arrancado en la parte final, no me lo esperaba", reconocía un Valverde que lamentó que su rival "ha cogido unos metros y no he podido taparlo. Yo he seguido con mi ritmo porque pensaba que no iba a hacer hueco, pero al final sí lo ha hecho, no queda otra que darle la enhorabuena".

El corredor del Movistar no se da ni mucho menos por vencido. "Está todo muy abierto y las diferencias son muy escasas. Todavía queda mucha Vuelta al País Vasco por delante", recalca el del Movistar, que pese a no poder aguantar la rueda de Contador en los kilómetros finales sí que demostró que ha acudido a la ronda vasca con la victoria final metida entre ceja y ceja, pues probó sus piernas en la primera ascensión a Gaintza y suyo fue también el ataque que dejó atrás al resto del pelotón en la subida definitiva. Quizás se vació demasiado en esos kilómetros, dando la cara con viento en contra. "Puede que sí. Yo he probado con fuerza, he arrancado bien y él me ha seguido porque está bien. El resto no ha podido".