OCÓ la primera tecla y ¡zas!, apareció ese mundo que tan bien conoce: la vida de la mujer contemporánea en todas sus circunstancias y vicisitudes, con todas sus alegrías y tribulaciones. Tocó la última tecla y ¡cataplum! apareció la mujer de hoy en letra impresa. Hay que matizar que el desenlace de la novela estrangula las emociones y sobrecoge pero eso habrán de descubrirlo, de primera mano, quienes lean Créeme, vas a comerte el mundo, la primera novela publicada, que no escrita, por Raquel Asenjo, bajo el sello editorial de Círculo Rojo. Raquel es una trotamundos que nació en Salamanca y fue criada en Bilbao tras pasar unos años de su infancia en Buchanan (Liberia), donde nació su hermano Fernando Asenjo. Su trayectoria profesional, de la mano de la docencia, le llevó a Madrid y a Mallorca y desde hace tres años ha lanzado un all in en la mesa de juego de la vida: su apuesta es ser novelista; su pasión, la literaria.

La sinopsis de la novela puede y debe resumirse con mucho cuidado para evitar que todo se descubra antes de tiempo. La novela relata las circunstancias vitales de Montse, Marga, Carmen y Marisa, protagonistas principales, y de sus familiares y allegados. Se tratan las complejidades de las relaciones familiares y personales, así como las experiencias laborales y la carga cultural de las creencias.

La trama principal lleva a quien lee a Montse y su hija, Martita, quienes se ven inmersas en una situación que tiene relación con el pasado. Parece que ambas diesen los mismos pasos pero... ¡Quieto, basta ahí! Digamos que viven similares experiencias pero en distintas condiciones de sus vidas. “Me interesan las mujeres porque cargan con todo el peso de la vida. Es una novela de mujeres y para mujeres”, pregona su autora.

Raquel, licenciada en Filología Inglesa por la UPV/EHU, volvió ayer a Bilbao, su tierra cuna y el cabo Cañaveral de su despegue, para presentar esta novela en el salón francés de la Sociedad Bilbaina. Le acompañó en la aventura Juan Luis de la Cruz, profesor de la Universidad de Deusto y de la UPV/EHU y poeta. Fue él quien fue desgranando los intereses más sobresalientes del libro. El salón estaba bien poblado. En él se encontraban el presidente de la Sociedad Bilbaina, Juan Goiria; su gerente, Manu Suárez; el secretario de la misma, Javier Rodríguez, y el bibliotecario, Luis Eguíluz; familia cercana de Raquel como su madre, Pilar Dávila derrochando humor; sus hermanos Fernando e Iratxe Asenjo, y sus sobrinos Gabriel y Elena Millán; y gente interesada en la obra como Itziar Zubieta, Fermín Hualde, Miriam Paredes, César Burón, Eva Martín, María Moreno, Marino Montero, quien llegó acompañado por Iñaki Iglesias; Carmen Gameza, María García, Enrique Hornillos, Jesús Rubianes, José Luis González, Francisca Nieto, madre del artista gráfico Asier Sanz; Rosa María Ibáñez, Ana María García, Olaia Hernández, Beatriz Ramos, Estanis Bustamante, Aduna Escobal y Gorka Etxebarria entre otros nombres propios.

El libro merece, para una de las presentes que pidió guardar el anonimato, la exclamación de ¡He ahí la mujer! Imagino que le hubiesen dado la razón, de haberla oído, Marta Fernández, Carlos Guerra, Iratxe Madariaga, Ana y Teresa Portillo, Azuzena Mayo, Luis Gutiérrez, Josefina Ardanza, Manuel Riesco, Lumi Campos, Maribel Gangoiti, Concha Juez; Libe Romaña, atenta a que toda la tarde fluyese con soltura; Carlos Agirre y toda una corte de asistentes que celebraron la publicación de la primera novela de Raquel con un brindis posterior a la presentación de una novela en la que caben la educación, la carga cultural de las creencias, el sexo, la diferencia de clases sociales, el suicidio en la adolescencia, el trabajo precario o las complejas relaciones personales y familiares. Donde cabe un mundo.

La escritora Raquel Asenjo presenta su primera novela, ‘Créeme, vas a comerte el mundo’ en la Sociedad Bilbaina

El salón francés acogió la puesta de largo de una novela que aborda el papel de la mujer en todas sus circunstancias y vicisitudes