"AUNQUE soy cantante, hablar sobre un premio que reconoce mi trayectoria es diferente. Estoy nerviosa y muy emocionada". La soprano durangarra Vanessa Goikoetxea, acostumbrada a actuar en grandes auditorios internacionales, no pudo evitar emocionarse al tener en sus manos uno de los XVI DEIA Laboral Kutxa Hemendik Sariak. Lo hizo recordando sus trece años de carrera “con mucho sacrificio, muchas horas de estudio, lejos de casa, pero con la suerte de que la vida me va regalando teatros por el mundo”. Fue la última en subirse al escenario de Plateruena Kultur Aterpea, pero sus palabras calaron muy profundo. Tener un sueño, luchar por él y hacerlo realidad. Eso es lo que han conseguido las ocho personas, entidades y asociaciones de esta edición.
Las palabras de bienvenida de la directora de DEIA, Marta Martín, dejaron claro el objetivo de los galardones. “Es un día para reconocer el esfuerzo y el sacrificio de quienes contribuís siempre a construir un Durangaldea mejor” y a esas palabras de elogio se unió la alcaldesa del municipio anfitrión, Mireia Elkoroiribe.
Una vez realizadas las presentaciones, los primeros en subirse al escenario fueron integrantes de la ONG Río de Oro. Y es que, la labor que viene realizando la entidad durangarra por el pueblo saharaui durante la última década, bien merece reconocimiento. “Tenemos claro que este premio no es solo nuestro sino de todas las personas que nos han ayudado en este camino”, agradeció Mikel del Arco, responsable de la ONG durangarra quien en unas semanas volverá a viajar a Tinduf para organizar el próximo programa de acogida.
Tras ellos fue el turno de Larrea Eskola; el único colegio público de Amorebieta-Etxano y que durante este curso celebra su 50 aniversario. Luciano Martínez, quien dirigió durante tres décadas el centro, tomó la palabra para dar las gracias y explicó que “durante estos 50 años hemos trabajado para ser referentes y poder ofrecer un proyecto de educación de calidad, lo hemos hecho apostando por el trabajo en equipo y sin individualidades”.
Otra de las protagonistas de la noche fue Ana Agirregomezkorta y su dedicación desde 1980 a la hostelería en la Herriko Taberna de Garai. Arropada por sus hijos, reconoció que “me encanta salir a por setas; cojo todo lo que puedo y ahora es temporada de hongo”, comentó sin querer desvelar dónde los recoge.
Y de secretos iba la cosa, ya que Alazne Jaio y Xabier Gorrotxategi, impulsores de la pequeña cooperativa DeliKatxe tampoco quisieron dar muchos detalles del próximo producto que pondrán a la venta. Lo que sí que dejaron claro es que “tener tantos veranillos de San Miguel y de San Martín no acompaña, pero algún día nevará y habrá ganas de tomar caldo”, lo que provocó las risas del público.
Como siempre, el deporte estuvo presente en los Hemendik Sariak. Primeramente para reconocer la trayectoria del jugador de dardos berriztarra Javier Carabias. El bicampeón de España ha disputado en dos ocasiones el campeonato del Mundo en Las Vegas y aseguró que sueña “con poder llevar a toda la gente que me acompaña de viaje” a la ciudad del juego.
La noche iba sobre ruedas y fue el momento de premiar a los deportistas de Indarpak Kirol Kluba. Fundado en 2015, la entidad iurretarra se mostró ambiciosa de seguir creciendo. “Seguiremos impulsando el deporte, en especial en los más txikis y en la parcela femenina”, apuntó Dalda Baraiazarra.
Por último, representantes de Ibaizabal Ikastola demostraron en el escenario que su concepto de educación y formación va un paso más allá de los estándares habituales y con el galardón en las manos, el director Iker Gómez de Segura confesó orgulloso que “no siempre sale bien, pero aquello que queríamos hacer y los sueños que teníamos es lo que estamos haciendo y este premio nos sirve para reafirmarnos en el camino y como reconocimiento a la labor que hacemos”.
“El futuro se está escribiendo ahora mismo”, predijo el conductor de la gala, Alain Salterain, al inicio de su intervención. Y así fue.
