Uno de los nombres propios de los Deia Hemendik Sariak Eskuinaldea es el de María Elisa Fano. Natural de Urduliz, del caserío Axpe, donde conocen a la perfección el mundo de la ganadería desde hace décadas, la cría de ejemplares vacunos destinados a la venta de leche ha sido su forma de vida.

No en vano, Marieli, como la conocen en el pueblo, fue la lechera de Urduliz durante un cuarto de siglo. “Empecé a repartir en 1970 y me jubilé en 1994. Ahora hace años que lo dejé coincidiendo con el nacimiento de mi hijo”, recuerda sobre aquellos inicios a bordo de un Renault 4 latas cargado a diario con 300 litros de leche.

Se levantaba temprano y recorría los barrios de la localidad: Labetzes, San Fermín, Cuatro Caminos, San Valentín, La Estación y Maruxas, además de acudir dos veces por semana a la vecina Sopela. “Salía a las 8.30 horas y volvía a las 14.00 horas”, afirma. Cargaba con siete lecheras grandes y otras tantas pequeñas donde transportaba la materia prima producida por las 33 vacas que tenían en el caserío, en el que llevan viviendo desde 1980.