s una imagen habitual a finales de septiembre cuando se acercan las fiestas patronales de San Miguel en Zalla y, con ellas, el montaje de las barracas en la plaza Euskadi, pero este año el traslado del mercado de los miércoles al barrio Artebizkarra se adelanta y no tiene fecha de caducidad. También difiere el motivo: el Ayuntamiento busca liberar la plaza para que no se produzcan aglomeraciones en la entrada al cercano colegio Mimetiz y ganar parte de su superficie durante los recreos.

Ayer, en el primer día en la nueva ubicación, la Policía Municipal vigiló las entradas al recinto en Artebizkarra en el que se instalaron 65 puestos. Pese a la confusión de algunos usuarios y comerciantes, como la persona al cargo de un puesto de ropa que prefirió no dar su nombre, que denunció "que los vendedores ambulantes somos los últimos para la administración", los agentes remarcaron que el cambio de sitio "se había notificado con antelación". Así mismo, se respetan las distancias fijadas en el momento de la reapertura tras el confinamiento y la obligatoriedad de dispensar gel hidroalcohólico.

A Benito Ares, que acude a Zalla desde hace treinta años y a las 8.30 horas ya estaba levantando su puesto, la plaza le parece "un lugar más adecuado por ser más céntrico y disponer de infraestructuras para los comerciantes, como aseo público", pero asume que "esto va para largo" y que hay que priorizar la salud. "Nos resulta más cómoda por la situación, aquí viene menos gente y eso que la plaza no está lejos y tenemos al lado la estación de tren y la parada de Bizkaibus", coincidió la propietaria de un puesto de ropa interior. Desde que han podido retomar su actividad en la llamada nueva normalidad "las ventas van muy flojas". Lo atribuye a que la gente mayor, "que representa gran parte de nuestra clientela, viene menos porque no se atreve a salir tanto a la calle debido la alerta sanitaria y le da reparo gastar pensando en el mañana, en las dificultades económicas que puedan venir" a consecuencia del coronavirus. En su mostrador "quienes vienen siguen tocando las prendas". Eso sí, "nadie se marcha sin gel desinfectante". Lo aplica ella misma, porque "me lo han robado dos veces".

La plaza Euskadi "está más a mano de otros lugares del pueblo a los que vamos a realizar gestiones aprovechando el día de mercado, mientras que si lo organizan en Artebizkarra vengo solo cuando es imprescindible", señalaba una vecina del municipio. En cambio, a otra le gusta más la distribución en dos grandes hileras de puestos a lo largo de la calle, ya que "al instalarlos a ambos lados de la carretera podemos ver todo el género de un vistazo".