El “siempre se ha hecho así” forma parte del discurso establecido dentro de los factores de resistencia que inciden en el mantenimiento de un modelo no igualitario en las fiestas populares, máxima expresión de la cultura social de cada pueblo. Analizar de un modo preciso los motivos que impiden un modelo festivo igualitario e inclusivo libre de violencia machista, y hacerlo de forma participativa, fue lo que impulsó al Ayuntamiento de Urduliz a realizar un diagnóstico con perspectiva de género de sus fiestas.

El estudio, realizado por Errotik Kooperatiba, se ha presentado a la comisión de fiestas y destaca como hoja de ruta para favorecer un cambio progresivo el Plan en contra de la Violencia Machista realizado por el Ayuntamiento. En cuanto a las propuestas de mejora, abarcan diez ámbitos de actuación. Uno de ellos es la comisión de fiestas, donde se busca “mejorar su dinámica” con estrategias para que las voces de todas las personas sean escuchadas y asignar tareas a cada uno de sus integrantes. También se expone la necesidad de “motivar” a la gente a participar mejorando los canales de comunicación y difusión como, por ejemplo, las redes sociales. Asimismo, a nivel municipal se señala la necesidad de “contar con la asesoría de expertas o técnicas en igualdad” y “abrir un espacio de participación para opinar sobre qué actos se pueden hacer en fiestas y analizarlos”.

Igualmente, en el programa de fiestas se apuesta por “mejorar la oferta de actividades para que sea más diversa e inclusiva”. Para ello se recomienda “abrir un espacio de debate para que la población diga lo que le apetecería tener en fiestas”.

Respecto a eventos populares como el homenaje a las amatxus en Santa Mariñe, se expone la necesidad de “garantizar que todas las madres recientes de Urduliz. En cuanto al txupinazo, se pide “fomentar la presencia de mujeres” en este espacio de protagonismo y “establecer criterios para valorar las personas candidatas a ser pregoneras”, así como incluirlas en el desfile con Buruandiak y Kakarraldo.

En cuanto a las comidas populares y eventos gastronómicos, se considera que están bien organizadas en cuestión de género y se apuesta por “mejorar la equidad en el reparto de roles de protagonismo en la organización”. Así, por ejemplo, en la celebración del concurso de rabú se plantea realizar “un premio a las mujeres cocineras o a la cuadrilla con más mujeres”.

En el ámbito deportivo, se subraya la necesidad de “garantizar la representatividad femenina en las actividades deportivas de exhibición”, como en las últimas fiestas cuando se programó un campeonato de pelota a mano femenino. En cuanto a las txosnas, conciertos e hilo musical, apuntan que la asociación Inola tiene un playlist con música libre de sexismo y que es “accesible para quien lo quiera”, y se reclama buscar grupos femeninos para contratar. Por último, respecto a la prevención de la violencia sexual, valoran que “aunque se han hecho iniciativas en las txosnas para que sean espacios seguros, todavía quedan cosas por trabajar”. Por ello proponen que las personas de las txosnas reciban una formación.