La cultura pisa fuerte y con seguridad el escenario de Kultur Leioa, que el próximo fin de semana, se moverá al sugerente compás de la danza y al animado ritmo de la música. Aukeran Dantza ofrecerá su espectáculo Biz Hitza. En ambos casos, a las 19.00 horas.

"Yo me vuelvo a sentir dantzari. Llevo toda la vida siéndolo, pero ahora es una sensación distinta", percibe Edu Muruamendiaraz, director de Aukeran Dantza Konpainia. Los golpes del coronavirus dejan marcas ante la invisibilidad de la programación de cultura. Y duelen. Y por eso ahora este coreógrafo y bailarín tiene "mogollón de ganas de pisar escenarios". Lo hará el viernes en Kultur Leioa, con sus compañeros Unai Balerdi, Ane Etxeberria, Unai Iraola, Maier Muruamendiaraz, Uxue Sánchez, Nahikari Sánchez, Danel Serrano y Claudia Talavera. Todos ellos bailarán el euskera. Movimiento acompasado para un idioma. Eso es Biz Hitza, con un guión de Xabi Paya y música en directo de Aitor Etxebarria. Intentamos explicar cómo surgió el euskera batua, desde los diferentes euskalkis", resume Muruamendiaraz. "Partimos de las cinco vocales, aparecen los diferentes euskalkis: de Iparralde, Bizkaia, Gipuzkoa y Araba y se van recreando diferentes coreografías. También se refleja la decisión de aunarse todos en un idioma para que no desapareciera el euskera y así surgió el batua. Es lo que intentamos contar con danza. Es muy conceptual, muy minimal, es algo abstracto y que sugiere distintos sentimientos", añade el director.

Es un espectáculo gratuito para los amigos de Kultur Leioa y que cuesta 10 euros para el público general. El aforo del auditorio será reducido para garantizar las medidas de seguridad. Espacio limitado sí, pero no cerrado. El telón sigue abierto en Leioa. "Es superraro ver butacas vacías y a la gente con mascarilla, pero por lo menos que nos dejen hacer y que nos programen", desea Muruamendiaraz, que ni se atreve a hablar del discurrir del próximo año. Es imposible cerrar fechas. Es impensable lanzarse a crear una nueva pieza.

De momento, Aukeran Dantza hipnotiza con Biz Hitza. "Fue todo un reto para la compañía, ha sido un trabajo muy potente. Además, queríamos darle un contrapunto a lo que estábamos acostumbrados a hacer hasta ahora. Por eso, la música también es una creación conceptual. Nos pusimos en contacto con Aitor Etxebarria, que utiliza la música electrónica, y la creación que ha hecho le da un punto diferente. Él tampoco había trabajado nunca para una compañía de danza, así que era un reto personal también para él. A nosotros nos costó adaptarnos mucho, pero queríamos hacer algo distinto, porque después de nuestro vigésimo aniversario queríamos romper y creo que lo hemos logrado", describe el director de Aukeran Dantza. Por eso, los espectadores se toparán con una danza con otra identidad. Cambio de registro. Atrevimiento. Victoria. "Tenía ganas de ver si éramos capaces de partir de otra cosa, de reinventarnos después de Aukeran, 20 urte", confirma el bailarín y coreógrafo. Y todo surgió en el marco de los actos del centenario de Euskaltzaindia, porque esta agrupación estuvo en la rueda de prensa de presentación de las actividades y vio que no había nada programado de danza. Y entonces, comenzó la historia de este binomio de danza e idioma que se verá el viernes en Leioa y el día 5 de diciembre en Sopela.

Con la 'triki'

El otro nombre propio de la agenda de Kultur Leioa este fin de semana será Xabi Solano. El músico de Esne Beltza bifurca su camino y en solitario asombra con BiEl escenario del teatro está oscuro, pero no en silencio. Se escucha el susurro de los trikitilaris del pasado, cada vez más alto. ¡Poned a bailar los dedos! El ambiente del caserío, del pueblo, de la plaza. La magia del acordeón penetra en nuestros oídos, a la vez que rendimos tributo a todos aquellos trikitilaris que han llevado la sonrisa a nuestra vida. Ese es el argumento del concierto de este artista, que precisamente cuenta con Edu Muruamendiaraz y y Uxue Urruzola para dirigir la parte de danza de esta actuación. El precio de la entrada es de 12 euros.