Sopela - Landaluze, de 60 años de edad, viudo y natural de Sopela, conoce a la perfección la labor municipal dado que ha sido concejal durante tres legislaturas. De 2003 a 2011 gestionó el Área de Urbanismo y de 2011 a 2015 como edil en la oposición.

¿Cómo se definiría para quienes no le conocen?

-Soy cercano y un defensor acérrimo de la participación ciudadana. De una participación realizada pisando la calle y contactando con el vecino. Por eso hace ya casi un año nos pusimos a trabajar en la redacción del programa electoral realizando jornadas de participación en los barrios. Todas las ideas fueron respondidas.

Tras su etapa como concejal, ¿por qué decidió presentarse este año?

-Tengo un amplio bagaje y la gestión municipal. Después de un tiempo fuera de la política, los afiliados al partido me respaldaron y animaron a presentarme. Lo hago con ilusión.

¿Qué puede aportar?

-Principalmente la apertura del Ayuntamiento al ciudadano. Si salgo elegido, me gustaría dedicar dos días a la semana para atender citas y consultas. También estamos estudiando una fórmula para crear una especie de buzón de sugerencias mediante el cual los vecinos tengan al menos una respuesta en 24 horas.

¿Cómo ve la situación actual del municipio?

-Creo que necesita un empujón importante. Tenemos que mejorar muchas cosas. Primero, internamente en el ayuntamiento, para que luego se refleje en la calle.

¿Cómo es su equipo?

-Ha habido una renovación total. Únicamente repite Naiara Ibarzabal respecto a la plancha de hace cuatro años. Hay gente joven y veterana que reúne un perfil profesional multidisciplinar. Hay ingenieros, profesores, médicos, abogados, etc.

¿Cuál es el mayor desafío?

-Cumplir nuestro programa. Son diez acciones muy concretas: la nueva ciudad deportiva de Urko, la ampliación de la escuela de Zipiriñe, el desarrollo de vivienda pública protegida, un laboratorio cultural, la mejora de los espacios públicos y de la accesibilidad, la igualdad entre hombre y mujeres, la instalación de una cubierta en el frontón Iturrieta, una política activa en residuos y reciclaje y el desarrollo económico.

Los vecinos han solicitado la ampliación del colegio Zipiriñe.

-Sí, por eso llevamos tiempo trabajando en nuestra propuesta, consensuada con Educación y el AMPA del colegio. Se basa en una ampliación in situ del centro con la construcción de un edificio sobre el patio de juegos que a su vez permita cubrir esta área infantil para que se pueda usar también cuando llueva.

¿Y qué hay del instituto Iberre?

-Nuestra idea es desarrollar el convenio urbanístico del sector de Abaro para poder hacer la ampliación del centro en las actuales instalaciones. Paralelamente, no pararíamos la modificación de normas del área de San Andrés para que en caso de no poder desarrollar el convenio de Abaro no se pierda tiempo y se pueda dar una solución a Iberre.

Explique el proyecto previsto para el frontón de Iturrieta.

-El cubrimiento del frontón forma parte de una actuación en la que se contempla crear un espacio multifuncional que servirá de pista de patinaje y dispondrá de una grada doble, para el frontón y para la pista. Además se construirá un edificio con vestuarios y el rocódromo tendrá también una cubierta.

¿Y la ciudad deportiva de Urko?

-Mejoraremos las instalaciones de fútbol, habilitaremos dos pistas de pádel, una de tenis, tres salas polivalentes, un circuito de running de 1,2 kilómetros, un skatepark más urbano y accesible, y también una zona juvenil multiaventura.

¿Qué planes contempla en materia urbanística?

-Queremos dar un impulso a esta área. Es una área que conozco bien y en la que me gustaría hacer cambios.

En su programa habla de la construcción de vivienda.

-Queremos desarrollar la vivienda pública protegida. El objetivo es ofrecer 35 nuevos pisos en régimen de alquiler y 12 en venta, en los que podrán vivir personas jóvenes y familias de Sopela. Este proyecto se desarrollaría en la zona de Asu y Loiola.

También está sobre la mesa la semipeatonalización del centro.

-La idea es la utilización compartida de las calles. Para ello planteamos la semipeatonalización de varias de ellas como Doctor Landa, Eleizalde y Akilino Arriola hasta Trokabide, para enlazar con el proyecto de Zipiriñe. También nos gustaría actuar en Loiola Ander Deuna, que es de titularidad foral. Al mismo tiempo, queremos mejorar la accesibilidad a la plaza Urgitxieta y planteamos instalar un ascensor para conectar con Loiola Ander Deuna.

¿Y la conexión con el hospital?

-Es un proyecto que está a falta de un informe. En todo caso, nuestro objetivo es darle prioridad y hacerlo rápidamente porque tenía que estar ya desarrollado.

El suyo es un municipio con un destacado valor turístico.

-La industria de Sopela está en la costa. Tenemos que regular y potenciar el sector del surf. Apostamos por la regulación de las escuelas mediante licencias para que convivan con el resto de usuarios de las playas, así como dotarles para 2020 de un local para que desarrollen su actividad.

¿Qué servicios le gustaría mejorar?

-Es imprescindible mejorar la tasa de reciclaje, el servicio de recogida y facilitar nuevas prestaciones a comercios. Pensamos en una nueva red de contenedores más grandes, así como aumentar la frecuencia de recogida para que con menos contenedores se pueda dar el mismo servicio. También queremos mejorar la recogida de residuos sólidos urbanos e implantar campañas enfocadas a obtener una mayor implicación de la ciudadanía. Por ejemplo, dos veces al año nos gustaría realizar una quedada que implique a la juventud.

¿Baraja un servicio nocturno de policía?

-Me gustaría retomar el proyecto para tener este servicio por la noche los fines de semana en verano. No obstante, creo que el convenio existente con la Ertzaintza funciona perfectamente, aunque todo es mejorable.